«La Transición fue posible porque tres generaciones de españoles querían libertad»

«Este libro trata de hacer comprender a los jóvenes de hoy en día que aquello que parece tan fácil no lo fue». El tipo de relaciones de entonces entre los sujetos políticos que configuraban diferentes corrientes opuestas permitió que avanzaran los acuerdos y la propia estructura social. «Hoy es imposible el diálogo político», lamentó Ysart. «No hay capacidad» para reeditar acuerdos clave como los Pactos de la Moncloa porque «este gobierno es muy raro; no es de todos los españoles», dijo. «Una de las lacras de nuestro país es que nuestra sociedad no es rica institucionalmente». «Tan solo tenemos clubes de fútbol», indicó.

En su relato novelado dos personas de distinta ideología convergen, tratando de mostrar las condiciones para que eso suceda; niveles de cultura, de renta, ansias de cambiar y libertad para hacerlo. Dos personajes que se van a Cuba a comprobar si se puede dar algo semejante en el país latinoamericano, llegando a la conclusión de que «es imposible porque no se dan esas condiciones que implican un salto cualitativo de la sociedad».

Preguntado por la actualidad política, el que también fuera profesor de la Universidad Complutense de Madrid y director de comunicación de Banco Santander, consideró que las elecciones primarias son un «error tremendo» y «una cosa perversa que crea caudillos, porque los vota la masa de militantes que solo quieren pan y la respuesta a ¿qué hay de lo mío?». Un partido debe ser todo lo contrario a ese planteamiento: «instrumentos para que la gente se vea representada y tenga cauce de participación».

Respecto a Cantabria, Federico Ysart, consideró que «esta tierra nuestra merece otro tipo de gente al mando». En Santander «hemos tenido siempre mala suerte con la clase política», dijo. Mencionó a Menéndez Pelayo, «que fue un tipo muy serio», o Pereda «aunque era un poco más aburrido». Por eso «merecemos gente de más altura».