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Viernes, 29 de enero 2016, 08:14
Bertín Osborne continúa sumando invitados a su programa «En la tuya o en la mía», y buenos datos, como el que este miércoles situaba a uno de cada cuatro espectadores frente a la visita de Alejandro Sanz a la casa más televisada de la televisión española. Un repaso por su vida y compartir confidencias con el anfitrión, y una broma con acento venezolano que termino no pareciendo tan broma.
Antes, en su charla, Bertín y Alejandro descubrieron que tenían muchas cosas en común: ambos reconocieron que sus madres no querían verlos actuar en directo, que son un desastre a la hora de recordar algunas de las fechas importantes o que se les atribuye un origen andaluz aunque ambos han nacido en Madrid.
Sanz recordó con cariño los años que compartió con Paco de Lucía y cómo se enteró de su fallecimiento por los medios de comunicación. El cantante explicó a Bertín que considera que en España no se estuvo a la altura a la hora de rendir homenaje al músico y añadió «hemos tenido la suerte de convivir en el tiempo con un genio al nivel de Beethoven o Mozart».
Después, el cantante confieso cómo fue el proceso de composición de su canción más popular: 'Corazón partío'. «Pensé que podía ser una canción para Camela, una rumbita», explicó. Sin embargo, al final Sanz decidió quedarse el tema para él y fue el mayor éxito que ha tenido en su extensa carrera profesional.
Tras su charla, Alejandro Sanz se puso al mando de la cocina para preparar un risotto. Allí se unió Fabiola, la mujer de Bertín que apareció en el vídeoclip de 'Y si fuera ella' de Alejandro Sanz, dato que el propio Bertín desconocía, y que se convirtió en leit motuiv para una suerte de broma de coqueteos y celos que, en ocasiones, se parecía mucho a la realidad. Fabiola, coqueta e interesada en el personaje «soy muy fan», dijo, aprovechó la ocasión para preguntar algunas curiosidades al invitado, como si tenía cierta manía a algunas canciones de sus incios. Sanz aseguró que no podía tener manía a ninguno de sus temas, aunque Bertín sí que tenía ese sentimiento hacia algunas canciones: «estoy hasta los cojones de 'Buena suerte, señora?».
Lo cierto es que la mujer de Bertín y Alejandro Sanz pusieron un punto de humor y de tensión al encuentro. Bertín Osborne fingió celos del trato de su mujer al cantante, y por haberse enterado allí mismo de su participación en el vídeo.
«Muy guapa, tu mujer. Un encanto», dijo en serio Sanz a Bertín cuando su mujer dejó la cocina, «algo bueno habrás hecho tú en la vida para merecer esto». Y Osborne confesó su extrañeza por que su mujer no le hubiera contado de antemano que había trabajado con él.
El continuo coqueteo entre ambos fue respondido con una divertida actitud del anfitrión, que hablaba a cámara ignorado por su mujer e invitado, mientras rallaba más queso del preciso para la receta de Sanz.
«Bueno, es que ahora sí va a ir en serio», protestó Bertín cuando Fabiola dijo a Sanz que iria con él en su equipo de futbolín: «si tú me dices ven, lo dejo todo», había contestado...
La broma continuó en todo momento, y la remachó Sanz al final del programa, que se acercó cómplice a la venezolana: «por cierto, iremos hablando, porque hay un vídeo que hacer que...». Antes, la esposa del presentador había llegado a preguntar a Sanz: «cantas bien, cocinas bien, ¿todo lo haces igual de bien?»... «Nadie se ha quejado de las camisas planchadas», contestó el artista. Osborne protestó de nuevo. Costaba tanto distinguir qué parte era broma y cual empezaba a ser un juego serio que hasta la propia Fabiola dudó: «Es que ya no sé si estás celoso en serio», dijo antes de que discutiesen ante la cámara de una supuesta fobia de la venezolana a Miami.
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