Variaciones en negro del Cine Club Santander

'Pitfall' (1948) de André de Toth; 'Los amantes de la noche' (They live by night, 1948) de Nicholas Ray; 'Corazón de hielo' (Kiss tomorrow goodbye', 1950) de Gordon Douglas; 'El cuarto hombre' (Kansas city confidential, 1952) de Phil Karlson; 'El beso mortal' (Kiss me deadly, 1955) de Robert Aldrich y 'A quemarropa' (Point blank, 1967) de John Boorman, configuran los títulos de esta nueva etapa de proyecciones y debates.

La organización ha apostado por continuar analizando el territorio noir desde el año 1948, y tras perderse en las ensoñaciones del Ulmer de 'Detour' el pasado martes, se aborda ahora una pequeña selección integrada por «dos obras maestras absolutas de sendos nombres claves del cine para empezar; otras dos pequeñas joyas de esos cineastas-artesanos que esconden mucho más de lo que se puede pensar; y dos piezas mayores de la dislocación y distorsión del género, una de los cincuenta, otra de los (finales) sesenta».

El ciclo se iniciará en las calles (reales) de Los Ángeles. y concluirá en la misma zona pero en color y en Cinemascope. Pasará también por la América rural y por Kansas. Se contemplan copias digitales y copias en 35mm. Como novedad se incorpora una sesión a las 17 horas, se anula la de las 22.15 horas y se mantiene la de las 19.30 horas, que incluirá la presentación y el debate consiguiente. No obstante, el Cine Club mantiene su cita con el público fijada cada martes.

'Pitfall'(1948), de André de Toth, retrata a un agente de seguros que vive en Los Ángeles con su esposa y su hijo. Al tiempo un ex policía convertido en detective privado se dedica a investigar los métodos de un estafador. Un filme original por su punto de vista que eludió el código Hays y que contiene una crítica al idealizado american way of life.

En 'Los amantes de la noche' de Nicholas Ray un joven acaba de escapar de prisión con otros dos reclusos. En la guarida donde se refugian vive una joven que pronto se siente atraída por él y con la que pronto se verá obligado a emprender una huida sin rumbo fijo. El cineasta de 'Johnny Guitar' debutó con este drama romántico, negro y desesperado, protagonizado por dos jóvenes en los años de la gran depresión. En los planos aéreos de la primera escena de la película, Ray utilizó por primera vez en la historia del cine un helicóptero como medio técnico.

La ficción de 'Corazón de hielo' de Gordon Douglas está centrada en un psicópata que se ha fugado de la cárcel donde cumplía cadena perpetua, y trata de subsistir reanudando sus actividades delictivas. La corrupción del poder, desde la policía a la justicia, es el eje de este filme interpretado por el gran James Cagney que sigue la huella del Cady Jarret de 'Al rojo vivo'. Una obra de género, de excelente factura.

En 'El cuarto hombre', cinta de Phil Karlson, Timothy Foster tiene un plan para atracar un banco de Kansas, pero necesita tres cómplices. Se pone en contacto con delincuentes perseguidos, pero todos llevan careta, de manera que no puedan reconocerse. El autor de 'El imperio del terror', exponente de grandes obras de serie B, firma esta obra brillante, dura e intensa.

El detective Mike Hammer recoge en la carretera, en plena noche, a una muchacha que huye de un peligro mortal. Poco después son interceptados por los acosadores. Es la trama de 'El beso mortal', de Robert Aldrich, el cineasta de 'Apache'.

«Primero encuentras un hilo. Ese hilo te lleva a un cordón, ese cordón te lleva a una soga...y con esa soga te cuelgan del cuello». Es un filme duro, áspero y oscuro. El suyo sí fue una vuelta de tuerca al noir.

Finalmente, en 'A quemarropa', John Boorman firma una dura, contundente e implacable histora de traiciones, prisiones, botín y organización criminal. Nervio, dureza, ruptura del tiempo y del espacio narrativos y una cámara obsesiva. Muy mal imitada.