«Aún hay que romper muchos tabús con respecto a las enfermedades mentales»

«Hay todavía un cierto estigma y seguimos teniendo dificultades y reparos a la hora de abrirnos respecto a un trastorno mental, cosa que no nos ocurre con una dolencia física», apuntó Manuel Jabois. «Antes era algo de lo que no se hablaba y que incluso se escondía, pero esto ha ido cambiando poco a poco», añadió. Aún así reconoció que estas patologías todavía se ven como una «información delicada y privada» que hace «que cueste decir a los demás que ha ido al psiquiatra o al psicólogo». El autor de 'Miss Marte' reconoció que le interesa ese «momento límite en que alguien empieza a poner el pie', una «delgada línea» en palabras del actor santanderino Eduardo Noriega quien puso el énfasis en la evolución del tratamiento de la salud mental en la ficción, lo que a su juicio constituye un reflejo del cambio de paradigma que ha venido produciéndose en los últimos años. Noriega reflexionó sobre la interpretación como una «patología controlada» en la que «juegas a ser otro» y en la que «el de adentro tiene que ganar, por lo que se trata de dejarse llevar para ver qué sale de ahí».

Además, destacó la evolución que se ha producido en los últimos años en el cine, para pasar de una apuesta por la «psicopatía asesina», para ampliar el abanico de patologías mentales huyendo de tabús. En este sentido, Noriega ha considerado que un buen ejemplo de cómo ha evolucionado el cine es la película 'El padre' dirigida por Florian Zeller, en la que Anthony Hopkins interpreta a un anciano que padece un trastorno de demencia que, como novedad, se traslada al espectador «metiéndole dentro de su cabeza».

Tanto Ignacio Peyró, para quien la soledad puede conllevar alguna de estas enfermedades, como la moderadora del debate, Helena de Carlos, directora de Comunicación de la Fundación Manantial, apostaron por una mayor inversión en campañas de concienciación en torno a la salud mental.

La escritora Marta Sanz reconoció que la ficción no puede asumir el papel que debe tener la administración como referencia de este ámbito. «Una cosa es que la literatura y el cine incidan en la manera de ver el mundo y otra que tengan que ser siempre edificantes y traducirse en posturas ético-sociales o humanas de las que las personas vayan a aprender algo en positivo. Eso es darle una responsabilidad que deberían tener las administraciones en un momento de evaluación absoluta de la salud pública», indicó. También se refirió a que en las patologías mentales hay causas endógenas pero también componentes exógenos que redundan en la tristeza y que pueden llegar a confundirse.

La escritora Laura Ferrero señaló que «si pudiera poner la literatura al servicio de un bien público, sería la salud mental» y puso en valor el papel de la ficción durante el confinamiento como una vía de evasión y como forma de seguir en contacto con la realidad «en un momento en el que necesitábamos transportarnos a otros lugares y que alguien nos hablara».

Uno de los temas que se abordó fue la creación y producción de relatos con la pandemia como telón de fondo, Jabois y Ferrero consideraron que «todavía se necesita distancia y algunos años para escribir una novela que interese», y pusieron como ejemplo el poco éxito que han tenido los diarios de confinamiento publicados en los últimos «La gente no quería leer sobre algo que acababa de vivir», valoraron, un tema en el que coincidió Noriega con el cine. «También se presentó una serie sobre el confinamiento que no tuvo buen resultado y que hasta mí me daba perece ver después de tanto tiempo en casa con tanta incertidumbre».

Un último asunto sobre el que se ha pronunciado Manuel Jabois fue el tratamiento mediático del suicidio, una cuestión de la que «no se informa lo suficiente» y que contribuiría a ayudar a quienes lo necesitan a través de artículos y reportajes de profundidad.

A ello se refirió también la moderadora Helena de Carlos, que ha subrayado que «hay muchas maneras de aportar y complementar las noticias sobre suicidios, indicando, por ejemplo, cómo puede prevenirse o buscar apoyo». Y además aportó un dato: «el número de suicidios se amplió durante estos últimos meses de pandemia».