Viadero rescata la figura del pintor y periodista santanderino Darío Carmona

'Darío Carmona, el pasajero fantasma del Winnipeg', que acaba de ver la luz en ediciones Renacimiento (Biblioteca de la memoria), será presentado el próximo martes en el Ateneo de Santander con la participación de Gunther Castanedo Pfeiffer, como «nerudólogo», gran conocedor de la biografía del poeta Pablo Neruda, el mentor intelectual de Carmona e impulsor del viaje del Winnipeg (el paquebote que llevó a bordo a más de 2000 refugiados republicanos españoles que eligieron Chile como su país de asilo).

De larga gestación, siempre «a la caza y captura de cualquier dato que me proporcionara conocimiento de un personaje tan desconocido y su entorno», el libro ha madurado durante mucho tiempo «a la espera también de la editorial más idónea para su publicación», avanza su autor.

Darío Carmona de la Puente (Santander, 1911-Quito, 1976) fue un polifacético personaje al cual la Guerra Civil truncó su incipiente carrera como periodista y también pintor, pero al que el exilio americano supo reconocer y aprovechar sus grandes cualidades innatas de comunicador, convirtiéndose en una figura internacional de la prensa, la radio y la televisión. Su amistad continuada con Neruda hizo que durante el primer exilio parisino trabajara como una especie de secretario personal encargado de desarrollar las tareas de selección de las cartas de los españoles encerrados en los campos de internamiento franceses y que manifestaban sus deseos de trasladarse a Chile en el barco Winnipeg.

Curiosamente, Carmona que participó activamente en el embarque de las alrededor de 2.500 personas que en el verano de 1939 formaron esta expedición, no se incluyó en la misma, pese a que su presencia entre el pasaje del buque ha sido recogida en algunas crónicas. El libro trata de recoger el itinerario seguido por el exiliado español que conoció el drama de tener que huir de su propio país para salvar su vida y a quien, paradójicamente, cuatro décadas más tarde unos acontecimientos similares le obligarán a regresar l punto de partida, huyendo esta vez de Chile, su patria de adopción. «Uno más de los que compusieron el exilio circular».

En su prólogo, Ramón Viadero alude a los «demasiados silencios y a su vez «demasiadas brumas y sombras» que se han sucedido «en el itinerario de un hombre que hizo de su vida una entrega a la causa común, mediante una militancia existencial basada en la amistad incondicional y la desinteresada y generosa interrelación creativa con algunos de sus congéneres».

Mañana lunes, por otra parte, la santanderina Fundación Bruno Alonso, en su sede de Isaac Peral, albergará la presentación del Archivo Digital J. R. Saiz Viadero, a cargo de la firma GC Proyectos Digitales, empresa responsable de su desarrollo. Un proyecto, como se avanzó, que ha supuesto más de un año de trabajo hasta recopilar toda la documentación del escritor: 3.500 documentos, más de 15.000 imágenes digitalizadas, su biografía y su bibliografía completas, y tanto sus libros como autor como las diferentes colaboraciones que ha realizado. Además de su filmografía, su trayectoria como actor y productor de cine, destaca su obra periodística, con más de 1.500 artículos en prensa y revistas.