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El joven profesor. Pedro Palazuelos llegó a Bielva en 1975, antes nunca había cogido una máquina de fotografía. En los cinco años que permaneció en el pueblo como maestro de la escuela inició una afición que se ha convertido en su forma de vida. En la imagen sonríe durante una de aquellas excursiones. CDIS
«La vida en una escuela rural a finales de los setenta era una aventura constante»

«La vida en una escuela rural a finales de los setenta era una aventura constante»

Palazuelos reúne en el CDIS las imágenes que captó durante sus años de docencia en Bielva, reflejo «y el espíritu colectivo que creamos»

Rosa Ruiz

Santander

Sábado, 28 de noviembre 2020, 06:54

A finales de los años setenta un timbre, en la Escuela Unitaria de Bielva, en el municipio de Herrerías, avisaba a las cinco de la tarde de que las clases habían acabado. Pero los niños, 22 alumnos por entonces, permanecían en sus aulas prácticamente hasta ... las diez de la noche, pintado, jugando al ajedrez e ideando nuevas aventuras con su joven profesor: Pedro Palazuelos. «Hasta los padres llegaron a sospechar de mí porque los chavales no tenían prisa para volver a casa», recuerda ahora aquel maestro con una gran sonrisa.

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