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R. G.
Domingo, 2 de octubre 2016, 10:41
El Balonmano Torrelavega arrolló ayer al Gijón Jovellanos en la primera ronda de la Copa del Rey. Los de Diego Soto dieron un recital de juego y goles ante un adversario que únicamente presentó batalla durante la primera parte. Apoyados en una defensa excepcional, los torrelaveguenses cimentaron su victoria en el juego a la contra y la gran aportación de todos sus jugadores. El Torrelavega y el Jovellanos salieron a intercambiar golpes desde el principio. Después de que los primeros cuatro goles, dos por bando, llegasen en un abrir y cerrar de ojos, el conjunto de Soto ajustó un poco mejor las marcas sobre sus rivales.
Marcos Dorado provocó una exclusión y dos penaltis de manera consecutiva. Tres acciones positivas del jugador gallego que sirvieron para que los suyos llevasen la iniciativa. Dos goles consecutivos de Ramiro Merino y Carlos Pérez dejaron a los cántabros con un claro 14-8.
Los visitantes tiraron de orgullo para tratar de frenar la sangría en la segunda mitad. Sobre todo del orgullo de Colledo y Molina, pero no fue suficiente. Todos los jugadores locales encontraban la manera de castigar al conjunto de Cotelo. Al final, el BM Torrelavega se impuso por quince en un partido en el que sólo hubo un equipo sobre la cancha. El Atlético Valladolid de Asobal será el siguiente adversario de los cántabros en la competición copera.
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