La bala saltadora de doce zancadas

Un tiempo sideral, once centésimas mejor de lo que soñaba cuando preparaba sus carrera y se motivaba con pegatinas en las vallas. Aún no ha sido superado (es el más antiguo de las pruebas de atletismo) y eso que los últimos 15 metros los hizo levantando un brazo tras haber derribado la última valla. Para hacerse una idea, en Río la medalla de oro, Kerron Clement, hizo 47.73 (casi un segundo más que la marca de 1992) si bien es el único que ha podido acercarse: en 2005 hizo una marca magnífica de 47.24.

Estos años muchos atletas han probado alternativas a los trece pasos entre vallas y los estudios indican que se pueden obtener registros de 47.30 o incluso menos con una secuencia desde 13-15 pasos entre vallas pero es complicado bajar de los 47 segundos. Young, que sigue vinculado al atletismo en Georgia, cree que su récord caerá antes o después. Algunos esperan que Wayde van Niekerk (183 centímetros) y actual recordman de 400 lisos (hizo 43.03 en Río para batir a Michael Johnson) se anime a probar con las vallas para terminar con un registro que ahora parece imposible de superar. Velocidad tiene el sudafricano, al que entrena una bisabuela de 74 años, si bien necesitaría manejar la técnica y la disciplina de las zancadas.