El Alega logra una victoria agónica ante el Zornotza
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Los de Mangas, que fueron de más a menos pero supieron sufrir, se llevaron el partido en los últimos segundosEl Alega regresó a la pista del Vicente Trueba y consiguió que el martes fuera menos martes, un paliativo en forma de victoria para comenzar la semana. Una victoria agónica eso sí, ante el Zornotza por 69-66, en un partido que se luchó hasta ... los últimos segundos y se salvó cuando el cronómetro estaba en las últimas gracias a las canastas de Alo Marín y Walter Cabral, que hicieron que los fieles del Trueba respirasen a gusto después de unos minutos comiéndose las uñas como si fueran sufridores del 1,2,3. Y eso que el encuentro comenzó con un juego muy rápido de los dos equipos, pero con los de Mangas guiñando un ojo a su afición y colocándose por delante en iniciativa e ideas.
La defensa que plantearon los verdes dejó fuera de juego a un Zornotza que, para ser justos, no tuvo uno de sus mejores días en ataque. Poco mordiente y menos acierto en la primera mitad del choque. En cambio los torrelaveguenses aprovecharon cada rebote ofensivo y cogieron cariño a línea de tres, porque muchos de sus jugadores se probaron desde los 6.75. El primero fue Bulic, que pocos segundos antes había logrado también la primera canasta del partido con una buena bandeja tras una contra fallida del Zornotza.
Grupo Alega
Cabral (14), Cazorla (2), Koné (4), Bulic (15), Saintel (3), Gómez (2), Palazuelos (4), Marín (17), Sans (8)
69
-
66
Zornotza
abrera (16), Gacic (0), Aldecoa (0), Ardanza (0), Salazar (9), Mendia (8), Cremo (6), Sainz de la Maza (2), Agbeko (4), Maricevic (7), Brnovic (14
Parciales 23-12, 17-15, 12-16, 17-23
Árbitros Alejandro López Lecuona y Miquel Remisa Tramuns
Quizá porque el Alega acusó el covid, comenzó a desinflarse. Tras aplazar el partido ante el Tizona Burgos del pasado sábado los de Magas apenas han tenido cuatro días para entrenar. Pero deben estar preparados. El encuentro de ayer no fue más que un prólogo de lo que está por venir. Y es que tienen por delante cuatro choques en 17 días y la obligación de ganar si quieren postularse como firmes candidatos al ascenso.
El primer cuarto, que se cerró con un contundente 23-12, además de un arranque fulgurante de los cántabros, crecidos hasta el punto de que Mikel Garita tuvo que pedir tiempo muerto a los pocos minutos, dejó el debut de Harold Cazorla en la pista del Trueba. El venezolano estaba en todos lados y fue muy generoso con las asistencias. En el segundo parcial, tras un triple de Cremo, que puso el 23-17, el recién llegado recuperó para conectar con Luis Gómez que no dudó en rematar el contraataque. Eso, y dos tiros libres de Koné pusieron tierra de por medio con una ventaja de diez puntos (27-17). Los cántabros seguían imparables y llegaron al descanso con 40-27. Pero en el ecuador del encuentro el Alega parecía aletargado, atascado, lo que se tradujo en que se le empezó a complicar el partido. Salazar entró en escena y el Zornotza comenzó a revivir, tanto que se colocó a solo un punto (65-64) en el último cuarto. El Alega supo sufrir. Su rival le pisaba los talones, pero Marín y Cabral salieron al rescate (69-64) y los dos tiros libres de Cabrera no fueron suficiente para batir a los verdes.
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