No es un adiós, es un hasta luego

El Blendio Sinfín cerró el curso con una derrota (27-35) ante el Puente Genil en un partido en el que lo de menos fue el resultado. El 'hasta luego' de los santanderinos a Asobal derrochó la confianza de quien sabe que regresará a la élite en el menor tiempo posible o que al menos va a luchar por ello. Los de Garabaya cerraron la temporada con un emotivo acto en La Albericia arropados por su afición.

Los pontanos salieron con la necesidad de controlar desde el primer minuto el partido mientras miraban de reojo a Cangas y Rebi Cuenca, los otros equipos implicados en la lucha por eludir la promoción de descenso. Los andaluces arrancaron potentes (0-3) y el desbarajuste santanderino tuvo que detenerlo Garabaya con un tiempo muerto antes de los tres minutos iniciales.

Así todo, el Blendio Sinfín reaccionó dispuesto a dedicar una última victoria en este complicado curso que les lleva a Plata e igualó el marcador (3-3). Los santanderinos contactaban muy bien con la segunda línea y reclamaron para sí el protagonismo, aunque no llegaron a tomar el control del electrónico. Los sinfinistas seguían sin problema la estela de un Puente Genil que no tenía grandes fisuras. Aún así, los de Garabaya aprovecharon los pocos errores que dejaron los andaluces sobre la pista (9-11). A falta de cinco minutos para el receso y con Pla en la grada por una roja descalificante, los pases al pivote santanderino ya eran muy previsibles así que los pontanos tomaron una ventaja lo suficientemente amplia para encauzar el triunfo al descanso (13-18).

Tras la reanudación el Sinfín regresó con las ideas claras y dispuesto a enderezar el partido (14-18), pero Puente Genil se aferraba a los dos puntos que le permitían mantener una temporada más a su equipo en la élite (27-35). Después, la bocina final y la promesa sinfinista de volver.

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