El Barça mantiene su hegemonía

El Barcelona, liderado los primeros minutos en el apartado goleador por Dika Mem y N´Guessan, tomó ventaja a partir de los primeros diez minutos, aprovechándose en varias ocasiones de la debilidad defensiva de los riojanos, que apostaron por ataques en superioridad, jugando sin portero. Antonio Carlos Ortega preparó las primeras rotaciones pasado el ecuador de la primera mitad, cuando su equipo dominaba el choque y ganaba por cuatro goles. Tras los tantos de Cindric y Janc, Velasco pidió tiempo muerto para corregir a los suyos, quienes no pudieron hacer nada ante un parcial de siete a cero que puso a los azulgrana con ocho de ventaja. Tras esa racha adversa, con su equipo sin ver puerta varios minutos, el técnico de los riojanos volvió a solicitar una pausa, tras la cual Javier García y Edu Cadarso consiguieron batir al azulgrana Emil Nielsen.

En los últimos cinco minutos el Ciudad de Logroño mejoró en ataque, pero no pudo recortar la brecha que el Barcelona había abierto y que parecía haberse vuelto casi insalvable. Con la destacada aportación goleadora de Mem, Fabregas y Janc, entre otros, el conjunto catalán cerró la primera mitad con una veintena de goles. Makuc y Aleix Gómez ampliaron la ventaja azulgrana al inicio de la segunda mitad, en la que el Barça se situó con diez de ventaja en los primeros cinco minutos. Los logroñeses reaccionaron con dos tantos seguidos de Keita y Cadarso, aunque enseguida Makuc y Janc llevaron la ventaja a la decena de goles. La diferencia se mantuvo hasta el último parcial, en una fase del encuentro en la que Emil Nielsen se convirtió en protagonista con una exhibición de paradas. Ortega, no obstante, no estaba satisfecho con la actitud de los suyos, a quienes exigió mayor tensión a la hora de afrontar los últimos minutos.

Con el partido ya decidido, ambos equipos disputaron un tramo final en el que el Barça siguió incrementando su renta, repartiendo los goles entre Dika Mem, Blaz Janc, Fábregas y Aleix Gómez. Por el lado de los riojanos, destacaron sobre todo por la aportación en la portería de Markelau y los movimientos ofensivos y goles de Keita.

El encuentro terminó con el Barcelona cumpliendo con el pronóstico. Los de Ortega demostraron su gran superioridad en un choque en el que el equilibrio entre ambos equipos se mantuvo durante los minutos iniciales de la primera parte. A partir de ahí los azulgrana no tuvieron piedad de los errores ofensivos del Ciudad de Logroño y dejaron liquidado el choque antes del descanso. En la segunda mitad, jugando con menor intensidad, se limitaron a mantener la diferencia, apoyándose en el gran trabajo de Nielsen en la portería y el acierto en los lanzamientos.