El Bathco recibe un fuerte correctivo en Logroño

La estrategia inicial naranja quedó clara desde el primer minuto: defensa 5-1 con Mikolaj Czaplinski en el avanzado y un acertado Mile Mijuskovic en la portería, que desbarató las cuatro primeras jugadas del ataque franjivino. La propuesta llevó a los torrelaveguensenses a arrancar con un contundente 0-3 tras salir con mucho ritmo. La eficacia escandalosa de Mijuskovic se fue perdiendo a medida que avanzaban los minutos (5-5) mientras que en el arco contrario Mohamed Aly despertó a la par que la defensa riojana iba ganando seguridad.

Los robos de balón al Ciudad de Logroño y la rapidez en los contragolpes naranjas obligaron a Miguel Ángel Velasco a detener el partido (6-9) tras ver como su equipo no era capaz de romper el 5-1 de Mozas. El Bathco Torrelavega lideraba el partido sobre la pista, pero una rosca de Edu Cadarso subió las tablas (10-10). La telaraña naranja servía para controlar a los riojanos, aunque no totalmente. El franjivino David García terminó volteando el marcador (11-10) a falta de cinco minutos para el descanso, mientras su compañero Álvaro Preciado amplió la ventaja. El Logroño llegó a la bocina con dos goles de ventaja (14-12) tras coger confianza sobre la pista y después de la llamada a capítulo de la defensa por parte de Velasco.

El Bathco comenzó mucho más entonado la segunda parte pero no terminó de reflejarse en el electrónico mientras los franjivinos consolidaban la distancia de dos tantos. Los naranjas no se querían soltar ni perder las opciones de seguir en el partido (19-18) y un acertado Javi Muñoz mantenía vivas las opciones de los torrelaveguenses.

Los de Álex Mozas intentaban mantener el ritmo pero los hermanos Cadarso se convirtieron en la peor pesadilla naranja. En esos momentos, David, con diez goles y Edu, con ocho, comandaban a los franjivinos sin perdonar ni un solo error naranja.

Mozas tuvo que pedir tiempo muerto (25-20) para reconducir la defensa después de que Ciudad de Logroño les cogiese la medida. No funcionó y el técnico del Bathco tuvo que detener de nuevo el juego apenas dos minutos después cuando los riojanos alcanzaban ya una diferencia de siete dianas (27-20). Los de Velasco tenían el partido en su mano mientras Aly se lucía bajo los palos y los torrelaveguenses no acababan de conectar con su mejor versión. Al Bathco les costaba hacer frente a las oleadas de un Ciudad de Logroño que terminó jugando a placer y celebrando su primera victoria en el Palacio ante los suyos (33-26).