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El Bathco recuperó su mejor versión para ganar (34-28) a un indomable Rebi Cuenca, que puso en más de un apuro a los torrelaveguenses, sobre todo durante la primera mitad de un partido igualado y lleno de emoción. El fantástico estreno de los naranjas, ... con un tanto de Fafa Cangiani, ya auguraba la mayor pesadilla del técnico conquense Lidio Jiménez, que durante los días previos al partido aseguró que quería evitar los ataques cortos sin transición defensa-ataque torrelaveguense.
Lo cierto es que el Cuenca no lo consiguió, al menos, durante los primeros compases del encuentro, lo que permitió a los de la capital del Besaya abrir una brecha (4-1) antes de llegar a los primeros cinco minutos de juego en el Vicente Trueba.
Bathco
arlos Calle, Adrián Fernández (3), Alonso Moreno (1), Álex Rubiño (1), Carlos Gómez, Javi Muñoz (7), Dani Ramos (2), Borja Lombilla, Isi Martínez (9), Pablo Paredes (2), Jokin Aja (1), Fafa Cangiani (2), Oswaldo Maestro y Mikolaj Czaplinski (6).
34
-
28
Rebi Cuenca
iguel Espinha, David Mach, Rudolph Hackbarth (2), Fede Pizarro (5), Sergio López (2), Diego Vera, Álex Pozzer (6), Rubén Río (3), Álvaro Martín, Nacho Pizarro (1), Daniel Neves (4), Pablo Simonet (3), Sergi Mach y Henrique Teixeira (2).
Parciales 4-2, 5-4, 6-7, 8-11, 10-14, 14-14 –descanso– 16-17, 20-19, 22-23, 25-25, 30-27 y 34-28.
Árbitros Jesús Álvarez Menéndez y Miguel Martín Soria Fabián
Los de El Salgar tardaron un poco más en entrar en el partido, pero cuando se desperezaron demostraron el potencial que tienen los de Lidio Jiménez y que todavía no han desplegado en lo que va de temporada. Los manchegos recortaron distancias e igualaron el marcador hasta que tomaron la delantera (5-6). Acababa de pasar el ecuador de la primera parte y el técnico naranja Álex Mozas dio entrada a Adrián Fernández en lugar de Isi Martínez. El central asturiano, que se llevó la ovación de la tarde, regresaba así a la pista para jugar sus primeros minutos de la temporada y dar por cerrado el capítulo de su lesión en el hombro derecho con rotura parcial del labrum incluida.
A pesar de la efectividad de Carlos Calle bajo los palos, Bathco seguía por debajo en el marcador (7-9), así que Álex Mozas no lo pensó mucho más y solicitó tiempo muerto para llamar a capitulo a los suyos. La charla técnica cayó en saco roto y tras la reanudación, los de Torrelavega no solo no acortaron distancias, sino que vieron como se alejaban más los conquenses (7-11).
Daniel Neves y Rubén Ríos resultaron una pesadilla para los naranjas sobre el 40x20. Mientras, el 6-0 de Cuenca se mantenía firme en defensa, subiendo la diferencia a seis goles (8-14), obligando a Mozas a parar de nuevo el partido. La diferencia era amplia, pero los torrelaveguenses no son de rendirse a las primeras de cambio. Había tiempo para dar un golpe de timón y reconducir la situación. Tuvo que regresar Isi Martínez a la pista para acabar con la sequía goleadora local. La diana en la siguiente jugada de Mikolaj Czaplinski obligó a Lidio Jiménez a lanzar la tarjeta verde sobre la mesa y cortar de raíz lo que podía suponer la remontada de los locales. Los del Besaya no iban a dejar que se les escapase el partido antes del descanso, así que apostaron por cuidar los pases para evitar errores y así llegar al descanso con tablas (14-14).
En la reanudación no dio tiempo ni a sentarse en las gradas cuando el Bathco se puso por delante en el electrónico con un Mikolaj Czaplinski acertadísimo desde el extremo. Apesar del arranque, la igualdad sobre la pista y en el resultado tomaron protagonismo. Cada diana en una portería contaba con una réplica prácticamente instantánea del rival hasta que el doble acierto de Javi Muñoz desde los siete metros, primero, y desde los seis, después, tiñó de naranja el marcador (20-18).
Dominio local
La diferencia de dos goles no se mantuvo mucho en el tiempo debido a las paradas de David Mach, que detuvo tres siete metros seguidos a los naranjas, y el acierto conquense en ataque. Igualada en el marcador (21-21) y vuelta a empezar. Los de Lidio Jiménez llevaban la delantera. De perseguidor a perseguido, solo había un gol de diferencia cuando se llegó a la mitad de la segunda parte y así continuaron jugando al ratón y al gato.
El Bathco abrió una diferencia de dos goles con la firma de Isi Martínez (27-25) y un Carlos Calle que paró todo lo que iba entre los tres palos. A partir de ahí, el dominio sobre la pista y el mayor acierto naranja permitieron a los de Mozas celebrar su primera victoria de la temporada en el Vicente Trueba.
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