El Bathco suma su primer triunfo en la Asobal ante el Cangas

El Bathco se aferró a la que podía ser su primera victoria de la temporada y lo consiguió con un último parcial de 4-0 en los minutos finales que dejó los dos puntos en el Vicente Trueba.

El partido arrancó con una muestra de las dinámicas de cada uno. Un ataque tranquilo y bien finalizado de los visitantes y una respuesta rápida y necesitada de los locales con gol de Jaime Gallego. La defensa tan reclamada a lo largo de la semana del Bathco BM Torrelavega saltó pronto a escena, con una sanción de pasivo sobre Frigoríficos Morrazo.

Al minuto 5 de partido, los naranjas se ponen por primera vez por delante con gol de Fabrizio Casanova. El Vicente Trueba, con un maravilloso ambiente a pesar de la fecha, tenía ganas de balonmano. Las mismas ganas que mostraba el muro naranja, forzando el segundo pasivo en apenas 6 minutos. En la siguiente jugada, 'Fafa' Cangiani pone el 4-2 desde el extremo.

Con el minuto 8 llegó el primer contratiempo para el Bathco BM Torrelavega con la exclusión a Casanova tras impactar involuntariamente en la cara de Rubén Soliño. Álex Mozas decidió dejar la portería vacía y dar entrada a Dani Serrano, inspirado tras su partidazo en La Catedral. Surtió efecto, pues en la primera pelota que agarró forzó la exclusión de Alberto Martín, en una acción idéntica a la de Casanova.

Con esa igualdad numérica, Serrano elevándose desde 9 metros puso el +3. Moyano se vio obligado a pedir su primer tiempo muerto cuando llegábamos al minuto 10 de partido. No tuvo el efecto deseado, pues el efecto de Martín Gayo se encontró con Calle. Segundos después, Cangiani ponía el +4.

El portero madrileño estaba en estado de gracia, con dos paradas consecutivas en la siguiente jugada. Las palmas sonaban en el Trueba, pero el golpe de realidad del día del debut invitaba a la paciencia.

El ritmo de partido se estabilizó en rumbo al cuarto de hora, con el BMT estabilizando la ventaja en 4 tantos. Un penalti y exclusión sobre Brais González permitió a Alonso poner el 9-4. Superada esa inferioridad, golazo de vaselina de Cangiani mediante, Morrazo empezó a mejorar en ambas áreas.

Las defensas sólidas y los ataques concretos recortaron en pocos minutos la diferencia a tres tantos. En ese momento hizo Mozas su primer cambio de cromos masivo, dando entrada a Lombilla y Martínez. Como es habitual, los naranjas solo notaron las modificaciones para bien, mejorando la frescura en su defensa.

El Bathco BM Torrelavega afrontó los últimos 5 minutos gestionando esa renta de tres tantos. Con Isidoro al mando, los ataques eran lentos pero con intención. Incluso cuando las manos traicionaban al receptor, un compañero recogía ese rechace. Por si fuera poco, Calle se encaminaba a su primera gran noche en Torrelavega, con la grada a sus pies.

Un error en el pase impropio de Serrano dio alas al Frigoríficos Morrazo, unido a un penalti que lanzó Moreno muy arriba. Los fallos permitieron a los gallegos empatar el partido al llegar a los dos últimos minutos de primera parte. Los primeros 30 se le estaban haciendo pesados a los naranjas y Mozas pidió su primer tiempo muerto para revertir la situación.

Solo la madera pudo evitar que Villoria mejorase la suerte naranja. Tampoco pudo hacerlo Jorge Prieto desde los 7 metros, encontrándose con Gerard Forns. Perdida la oportunidad de recobrar la ventaja al descanso, la bocina sonó con el luminoso reflejando 12 – 12.

Torrelavega ya había visto la película de sufrir una remontada en la Liga Sacyr Asobal. Pero su equipo salió dispuesto a sacudirles el miedo con un rápido gol de Gallego. Por su parte, Asensio y Simes tenían otro partido en la cabeza, poniendo a los cangueses por delante por primera vez desde el minuto 5.

La corriente parecía bajar de color azul, marino por supuesto. Las jugadas ofensivas de los cántabros no encontraban la claridad del primer periodo y se apreciaba el temblor en las palmas de su hinchada. Según pasaban los minutos, las localidades de Cangas do Morrazo y Valladolid parecían acercarse en el mapa.

A pesar de ello, un giro espectacular de Gallego en el minuto 40 reponía el empate. Los peores minutos naranjas en pista se habían salvado sin males mayores. Recuperar la solidez defensiva se antojaba clave si los de Mozas querían recuperar el mando del partido. Los atacantes gallegos encontraban grieta tras grieta en el esquema torrelaveguense.

En el lado positivo, los ataques encontraban portería, con anotaciones de Gallego, Hernández y Prieto. Con empate a 19 hizo Carlos Calle su primera parada del segundo tiempo. Instantes después, Alonso Moreno levantó al Trueba. Las tornas habían cambiado, con el madrileño repitiendo parada en el siguiente ataque azulón.

La intensidad aumentó exponencialmente en los minutos siguientes. Ambos conjuntos eran conscientes del momento de partido y competían cada posesión como si fuera la última. No en vano, del minuto 42 al 48 solo se vio un gol. Calle y Forns se convirtieron en protagonistas del partido con un arsenal de paradas.

Ya en el 49 Frigoríficos Morrazo recuperaba la ventaja, pudiendo ampliarla a dos tras un penalti de Moi Simes que se encontró con la madera. Definitivamente la suerte pintaba color naranja. Casanova colocó de nuevo el empate a la contra. Con los goles cayendo otra vez en ambas porterías, los 10 minutos finales se presentaban de infarto.

A falta de 6 minutos, con empate a 22 en el marcador, Moyano solicitó tiempo muerto. Las espadas estaban en todo lo alto al sonar la bocina. Una defensa espectacular de Borja Lombilla con gol al contraataque incluido Torrelavega patas arriba. También lo hizo la parada siguiente de Calle. Sin embargo, un atento Jenilson Varela recogió el rechace para reponer el empate.

El fallo defensivo provocó el tiempo muerto de un cabreado Mozas. La bronca sirvió para un gol rápido de Cangiani en la reanudación. Los gritos de «¡Sí se puede!» hacían temblar los cimientos del Vicente Trueba. La pérdida posterior de los gallegos permitió a Calle encontrar de nuevo al argentino que ponía el +2 a falta de tres minutos.

Moyano solicitó otro parón que sirvió de poco. El Frigoríficos Morrazo estaba en clara desventaja ante una hinchada totalmente volcada con los suyos. El jugador número 8. Una gran defensa gallega forzó el fallo de Martínez, pero Carlos Calle, otra vez Carlos Calle, acercaba al Bathco BM Torrelavega al objetivo. La undécima parada para el madrileño. Con minuto y medio volvió a pedir tiempo muerto Mozas. El gol de José Carlos al volver ponía el lazo al partido. Y como nunca se sabe, Lombilla puso sobre la bocina el +4.

Un 27 – 23 con el que llegaba la primera victoria naranja en Asobal. Se celebró como un título. Porque así sabía, porque por la primera se empieza. Una valla superada en una carrera que, nadie se olvide, es una maratón. La próxima parada para el escuadrón naranja será de nuevo en Torrelavega, el día 16 de octubre cuando les visite el BM Iberoquinoa Antequera.