Bidasoa corta el crecimiento del Sinfín

Los de negro lo consiguieron y contuvieron al arranque fulgurante del Bidasoa apoyándose en los aciertos de Ernesto Sánchez en la portería y la intensidad defensiva. El Blendio Sinfín había frenado el empuje irundarra, aunque es cierto que no estuvieron acertados de cara a gol, desaprovechando varias acciones de empate. Pasado el ecuador de la primera mitad el conjunto de Jacobo Cuétara aprovechó la falta de contundencia ofensiva santanderina, con numerosas pérdidas de balón, para abrir una brecha de cuatro goles (4-8). Perbela y Tioumentsev, contundentes, volvieron a recuperar terreno para los santanderinos. El ataque de siete contra seis con el que Garabaya pretendía mejorar las prestaciones ofensivas de los suyos, parecía dar resultado. No obstante, Bidasoa siguió mostrándose regular en la anotación y no permitió que los cántabros rebajasen la diferencia por debajo de los dos goles.

El acierto en las acciones de contragol situó a los de Jacobo Cuétara cinco arriba a falta de cinco minutos para el descanso. Blendio Sinfín, sosteniéndose en el acierto de Ernesto Sánchez e insistiendo en las acciones al interior, contrarrestó a los guipuzcoanos, reduciendo la desventaja a solo un gol antes de marchar a vestuarios (13-14).

Skrzyniarz, que ocupó la portería en la segunda mitad, detuvo los primeros intentos de empate del Sinfín en el reinicio, aunque finalmente los de Garabaya alcanzaron la igualada. Tras unos minutos de atasco ofensivo, el Bidasoa reaccionó y, gracias a su intensidad defensiva y a la búsqueda de mejores opciones de tiro, se situó de nuevo con una renta de tres (15-18). Solo Ernesto, con sus fantásticas paradas, sostuvo a los santanderinos en esta fase del choque. Las pérdidas de balón en ataque supusieron un lastre para el Blendio Sinfín, que no pudo sacar así rédito a la soberbia actuación de Ernesto. Esos errores los supo aprovechar perfectamente el equipo de Jacobo Cuétara, en acciones veloces y eficaces, que le sirvieron para llegar a los últimos diez minutos con cuatro goles de ventaja (18-22).

Bidasoa arrancó el tramo final del choque con una cómoda renta, confiando en la labor en la portería de Skrzyniarz como baluarte defensivo y en el acierto de Mújica en ataques. Una pérdida de balón tras un gol de Bidasoa dejó a los santanderinos con seis tantos de desventaja, diferencia prácticamente irrecuperable con solo cuatro minutos por delante cediendo los dos puntos, que se marcharon a Irún (21-29).