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La noche es más oscura justo antes de amanecer, aseguraba el poeta inglés Thomas Fuller para afirmar que las cosas se ven peor justo antes de mejorar. El Blendio Sinfín sacó una lección de su visita a Artaleku tras caer (35-15) y pagar los ... platos rotos del Bidasoa en la Copa del Rey.
Asier Nieto abrió el marcador en la segunda llegada de los guipuzcoanos, a la que respondió inmediatamente Perbela, autor de los dos primeros tantos de un Blendio Sinfín mucho más entonado en el inicio de partido que en la jornada anterior. Nada hacía presagiar la tarde que esperaba a los santanderinos cuando a los cinco minutos el conjunto de Rubén Garabaya se puso por delante, gracias a su buena defensa y el acierto en el lanzamiento. Los irundarras respondían a cada acción en un choque que se caracterizó por la igualdad y el juego intenso en los primeros minutos. A partir de ahí comenzaron los problemas para los de negro.
Cavero adelantó al Bidasoa desde siete metros. Con Perbela excluido, los de negro tuvieron que afrontar las siguientes acciones en inferioridad, lo que fue aprovechado por los de Irún para situarse dos arriba. El Blendio Sinfín en las siguientes acciones erró en ataque y los de Jacobo Cuétara aprovecharon sus fallos para cerrar un parcial de tres a cero gracias a su disposición defensiva abierta y a la fuerte presión sobre los atacantes sinfinistas.
Bidasoa
Mehdi Sadri Harbaoui, Jakub Jacek Skrzyniarz, Iñaki Cavero (2), Ander Ugarte (3), Mikel Zabala (1), Tao Gey (3), Eneko Furundarena (5), Julen Aguinagalde (2), Julen Múgica (3), Mihajlo Mitic (3), Jon Azkue (1), Thomas Tesoriere, Matheus Da Silva (1), Gorka Nieto (3), Dariel García (4) y Asier Nieto (4).
35
-
15
Sinfín
Mohamed Aly, Ernesto Sánchez, Gus Alonso, Nico Bono (1), Marcos Domínguez (2), Berto Pla (2), Marcos Aguilella (2), Diego Monzón, Leo Alonso (1), Ángel Basualdo (2), Óscar García (1), Lon, Perbela (3), Nico Zungri y Pablo Rama (1).
Parciales: 2-3, 6-3, 9-3, 13-5, 15-7, 20-8 –descanso– 21-10, 23-12, 25-12, 27-12, 31-14 y 35-15.
árbitros: Lorena García Gil y Alberto Murillo Castro.
Con los santanderinos en dificultades arriba, el Bidasoa se puso con cuatro de ventaja pasados los primeros diez minutos. Garabaya no quiso esperar más y pidió tiempo muerto con el propósito de poner orden en el juego de su equipo y dar entrada a Lon en la primera linea. La llamada a capítulo del entrenador asturiano del Blendio Sinfín no tuvo el efecto esperado. Los de negro seguían fallando en ataque y dejando huecos en defensa, lo que permitió al Bidasoa alcanzar una renta de siete goles. Tras ocho minutos sin anotar, a los santanderinos empezaba a complicárseles de verdad el partido en Artaleku.
El conjunto de Jacobo Cuétara no perdonó los errores del Blendio Sinfín, castigándolo y poniéndose diez arriba pasado el ecuador de la primera parte. Los sinfinistas dispusieron defensa de 5-1 y tras enlazar cuatro tantos, recortaron la diferencia, forzando el tiempo muerto de los de Irún. En los cinco últimos minutos antes del descanso, el Bidasoa se recuperó y devolvió el parcial a los santanderinos, mostrando su superioridad y cerrando la primera parte con una ventaja de doce goles.
El Blendio Sinfín volvió de vestuarios con mejor aspecto y más atinado en ataque, lo que mejoró sus porcentajes en el lanzamiento. El Bidasoa, cómodo con su ventaja, tardó en entrar en juego en la segunda mitad, sosteniéndose en defensa gracias a la efectividad en las paradas de Harbaoui, una pesadilla para los lanzadores de negro.
La mejora de los cántabros apenas se notó en el marcador, ya que la ventaja de los guipuzcoanos era lo suficientemente amplia como para permitirse errores. De hecho, los de Cuétara , en el ecuador de la segunda parte, ganaban por trece y les bastaba con no desplomarse para llevarse un encuentro resuelto ya en la primera mitad.
Los de amarillo, tras su inesperada eliminación copera contra el Trops Málaga de División de Plata, volvieron a demostrar su superioridad y, aprovechando los errores ofensivos del Blendio Sinfín, se llevaron el partido con toda justicia por una diferencia de 20 goles. A los de Rubén Garabaya, con una desventaja imposible de recortar, se les hizo demasiado largo el partido en Artaleku. Resignados, no les quedó otra opción que pasar el mal trago, muy amargo, y esperar el final del choque. Ahora les toca recuperarse de esta derrota y ponerse a pensar en los próximos encuentros ante rivales directos en cuanto a objetivos.
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