Elcio Carvalho, exportero del Sinfín, defenderá el arco del Bathco Torrelavega

Será la primera vez que Carvalho vista el naranja de los torrelaveguenses, pero el caboverdiano no es precisamente un debutante en la categoría. El portero no solo es un viejo conocido para los aficionados cántabros tras casi dos temporadas en el Unicaja Banco Sinfín santanderino. También cuenta con experiencia en Asobal, uno de los factores que ayudó a desnivelar la balanza a su favor entre las diversas opciones que se barajaban en los despachos del pabellón de la capital del Besaya.

Carvalho retorna a Cantabria y a Asobal con la intención de reivindicarse. El nuevo '16' del Bathco Torrelavega es muy claro sobre su presente: «Tengo muchas ganas de volver a jugar en Asobal. Creo que regreso para demostrar mi potencial, que es superior al mostrado en mi anterior etapa». En su primer contacto con la élite del balonmano español con el conjunto santanderino, Carvalho defendió durante temporada y media el arco del club de la capital cántabra.

El portero recaló en el Sinfín en febrero de 2020 y apenas pudo jugar debido a la pandemia. En su última temporada en Asobal jugó 31 encuentros en los que obtuvo más de un 22% de acierto entre todas las intervenciones y destacó por su corpulencia. Roza los dos metros de altura, con un peso por encima de los 100 kilos.

El cierre de la operación fue meteórico. Todo fue «muy rápido», como explica Carvalho. «Tras confirmarse la lesión de Carlos Calle me avisaron mientras estaba con la selección y en unos días cristalizaron las conversaciones hasta hoy -por ayer-, que ya me incorporo a los entrenamientos con el resto de la plantilla».

El club ya está inmerso en los trámites de la ficha del caboverdiano con el objetivo de que debute mañana ante el Ciudad de Logroño y forme con Murillo Araújo la dupla de porteros naranjas. En principio, en el Bathco Torrelavega son optimistas en cuanto al debut de Elcio en el Palacio de los Deportes de La Rioja y no creen que haya ningún contratiempo que le impida vivir sus primeros minutos bajo las órdenes de Álex Mozas.

Lo cierto es que con la llegada de Elcio Carvalho los torrelaveguenses ponen solución a uno de los problemas que acosaban al equipo naranja después de que el portero Carlos Calle tuviera que abandonar el 40x20 en la primera mitad del partido ante el Ademar León el pasado 30 de octubre y posteriormente se diagnosticara al madrileño una rotura de ligamento cruzado anterior en su rodilla derecha, que le obliga a pasar por quirófano el 19 de noviembre. El parón de Asobal por los compromisos internacionales de los Hispanos les ha dado un margen de tiempo más amplio a los responsables del área deportiva naranja, que no han dudado en aprovechar a su favor.

Carvalho cree que «han visto que puedo ayudar al Bathco Torrelavega en los objetivos que tienen marcados y, además, que tengo dentro de mí condiciones suficientes para poder sacar adelante esta oportunidad que me han dado». De momento, lo único seguro es que el portero tiene una oportunidad que no quiere desaprovechar.

El caboverdiano, que no comenzó a jugar al balonmano hasta los catorce años, se formó en su país natal y posteriormente le llegó la oportunidad de debutar en el balonmano luso. En Portugal pasó por clubes como el Académico de Viseu, el Xico Andebol o el Juventude do Lis, para recalar posteriormente en el Sinfín de Asobal.

Carvalho llega a Torrelavega procedente del Unión Financiera Balonmano Base Oviedo, donde ha estado entrenando durante toda la temporada. Sin embargo, la normativa de Primera Nacional, que impide contar con más de un extranjero por plantilla, imposibilitó al club asturiano tramitar su licencia federativa y a Carvalho poder competir con el equipo carbayón.

A la experiencia en las Ligas española y portuguesa, el 16 naranja también es un habitual de las convocatorias internacionales de Cabo Verde. En las filas de su país, el arquero ha disputado una Copa de África y un Mundial, el de Egipto 2021, en el que su selección se vio obligada a retirarse tras dejarles el covid-19 sin el número mínimo de jugadores disponible.

Inmerso ya en la rutina naranja y con la vista fijada en Logroño, Carvalho afina sus sentidos a la espera de que se confirme su ficha con el Bathco y empezar a acumular paradas para el equipo de Torrelavega.