El Liberbank consigue una victoria con sabor a permanencia

El Sinfín salió pausado, pero esa disposición tranquila dio sus frutos. Los visitantes penalizaron a un conjunto logroñés que tardó seis minutos en anotar, lo que propició que los de pupilos de Montesinos se cobraran la primera renta con un parcial de 0-4 sorprendente, habida cuenta de que su contrincante ocupaba la tercera posición. Mientras el Balonmano Logroño se estrelló una y otra vez ante Ernesto Sánchez, el ataque foráneo hizo prácticamente pleno en sus aproximaciones. El portero madrileño resultó un muro infranqueable (1-6, min. 8).

Tanto Ernesto, en portería, como José Manuel Herrero Lon, en la definición, sustentaban a un Sinfín que sabía que si el Logroño cogía velocidad de crucero, se complicaría el partido. Así, los hombres de Velasco aprovecharon dos imprecisiones contrarias para apretar el marcador (3-6), aunque el binomio Sánchez-Herrero siguió funcionando a la perfección. Mientras el meta visitante se erigía en el protagonista del encuentro, su homólogo local permanecía inédito. Era tal la endeblez local que Miguel Velasco se vio obligado a pedir tiempo muerto cuando el Sinfín había vuelto a alcanzar su máxima diferencia (7-12). Tras un agradecido intercambio de contras por parte de los dos equipos, los de Víctor Montesinos se fueron ganando al descanso con dos tantos de ventaja tras un gol de Ramiro Martínez sobre la bocina (13-15). Escaso premio.

Los locales estuvieron cuatro minutos sin anotar. Aunque el portero y el pivote respondían, Montesinos necesitaba algo más del resto. Al borde del minuto 40, un gol de Moreira y otro de Sánchez-Migallón, intercambiados con una nueva acción de mérito de Rangel Luan (decisivo desde su salida), empataron la contienda a 17. El Logroño llegó a hacer lo que parecía más difícil, empatar, pero le entró el miedo a ganar. O eso pareció. Una infracción de Sánchez-Migallón provocó su segunda exclusión, Herrero no perdonó y, en la réplica, Edu Cadarso se encontró con la escuadra. El 19-22, a falta de doce minutos, parecía definitivo. Edu Ortiz devolvió la emoción al partido con dos goles que apretaron la contienda (21-22). Pese a sufrir la exclusión de Leo Alonso, Ernesto Sánchez firmó su enésima intervención de mérito, lo que acercó una victoria más que merecida. Pla y Ramiro, a la contra, sellaron el 23-27 definitivo.