El Liberbank no pudo culminar la remontada y se queda fuera de la fase final de la Copa del Rey

Con el resultado de la ida al entrenador local, Rodrigo Reñones, sólo le quedaba plantear una estrategia muy agresiva, con presión en toda la cancha, sin embargo el BM Benidorm encontraba los espacios necesarios para posiciones cómodas de lanzamiento, especialmente Lignieres.

Además, los alicantinos también se empleaban con contundencia en tareas defensivas y, junto con el acierto de su guardameta Tercariol, les permitió situarse, antes del minuto diez de partido, con un 3-6.

Pese a los esfuerzos de los locales por darle la vuelta al marcador, los hombres dirigidos por Fernando Latorre siguieron con la misma intensidad en los siguientes minutos, y tan solo en el último segundo de la primera parte, gracias a un gol desde los siete metros de Dimitrievski, el Sinfín pudo ponerse por delante (17-16).

Un buen inicio de segunda mitad, con un parcial de 3-0 para el Liberbank Cantabria Sinfín, animó a la grada local, que vio una posibilidad para creer en la remontada.

Fue un espejismo, ya que el BM Benidorm reaccionó a tiempo para cortar la hemorragia y seguir controlando sin muchos apuros su renta de ocho tantos del partido de ida.

La eliminatoria parecía sentenciada y el partido se transformó en un festival anotador por parte de ambos equipos, pero a falta de cuatro minutos para el final, el Liberbank Cantabria Sinfín alcanzó una ventaja de seis tantos (34-28) que obligó a Latorre a pedir tiempo muerto.

El parón le vino bien a su equipo para volver a asentarse en la cancha y, de paso, romper el ritmo anotador de los locales, que ya no pudieron recortar más la diferencia y finalmente se tuvieron que conformar con una victoria (36-31) insuficiente para pasar la eliminatoria.