«Mi objetivo era jugar en Asobal, pero no sabía que iba a ser ya»

El internacional júnior argentino llegó a España en el verano de 2021 para jugar en División de Honor Plata en las filas del Zamora. Allí su papel no pasó desapercibido y acabó firmando por un Sinfín que ocupaba entonces los puestos de descenso de la máxima categoría nacional. «Claro que el objetivo era acabar jugando en Asobal, pero cuando acepté la oferta todavía no se había salvado el equipo», cuenta el bonaerense. Lo que no obsesiona a Bono son los goles: «Si los laterales están bien, prefiero darles la jugada para que la terminen ellos».

-Dieciséis goles en un partido no es un número al alcance de la mayoría.

-Puede sonar bien, pero siete fueron de penalti (se ríe). Fui transformando los siete metros y a eso se unió que el equipo estaba funcionando muy bien sobre la pista y agarré confianza. Una vez que todo comenzó a darse de cara ya fueron saliendo los goles uno tras otro.

-Siete fueron de penalti, pero su efectividad total desde esa distancia es de 100%.

-En los entrenamientos estamos practicado bastante el lanzamiento de penalti. Es cierto que transformé siete de siete y el que tiré ante el Cisne también entró. La temporada pasada en Plata alcancé más de un 70% así que este año ojalá vayan bien las cosas y pueda mejorarlo.

-Con 32 tantos en cinco jornadas, se puede decir que Nico Bono es un central goleador.

-Sí suelo meter goles, pero si los laterales están bien, prefiero darles la jugada para que sean ellos quienes la terminen. Luego, si hay confianza, ya empiezo a tomar más tiros para mí, pero lo primero siempre es aportar al equipo sobre la pista. Prima siempre lo colectivo sobre lo individual.

-Para ser un debutante, Asobal no se le está dando nada mal.

-De momento, en los partidos que jugué hasta ahora -ha disputado todos los partidos con el Blendio Sinfín hasta el momento-, me sentí cómodo, pero yo principalmente quiero hacer jugar al equipo y que lo hagan bien los laterales y pasarle bolas al pivote. Después, si viene acompañado de meter goles a nivel personal, pues bien, pero no es mi objetivo prioritario.

-Al Blendio Sinfín tampoco le van mal las cosas.

-Hicimos unos buenos partidos. El ataque estuvo bien en todos excepto contra Anaitasuna y en cuanto a la defensa se está funcionando muy bien, salvo en algunos momentos de distracción. El equipo está viviendo un inicio muy bueno y espero seguir optando a hacer jugar a los demás durante el resto de jornadas que quedan.

-¿En qué nota más el cambio de Plata a Asobal?

-Sobre todo en la calidad individual de los defensores. Bueno, en la calidad de todos en realidad y en el estilo de juego. Acá se corre mucho más. Luego la defensa y los ataques son el mismo modelo que en Plata, así que donde más eres consciente de la diferencia en es los jugadores y como usan su velocidad. Por ejemplo, a nosotros nos han tocado hasta ahora rivales que corren mucho y eso hace que tengas que estar siempre muy concentrado.

-¿Qué espera de su primera temporada en la élite?

-A nivel personal, seguir aportando el trabajo al Sinfín y creciendo lo más posible. En cuanto al equipo, salvarnos lo antes posible y, una vez conseguido este objetivo, llegar lo más alto posible en la clasificación.

-¿Qué le llevó a aceptar la oferta del Sinfín?¿Era su puerta a Asobal?

-Claro que el objetivo era jugar en Asobal, pero no sabía que iba a ser ya. Cuando acepté la oferta del Sinfín, el equipo no se había salvado todavía. Me habían hablado muy bien del club y, aunque no sabía si se iban quedar o si iban a la B, no me lo pensé. Yo quería jugar en Asobal, pero no tenia ninguna oferta concreta. Del Blendio Sinfín me gustó el proyecto y firmé.

-Su adaptación fue rápida.

-No lo pensé mucho y el vestuario estuvo muy bien, me acogió sin problemas y se hizo muy fácil la adaptación. Creo que todo eso ayudo para que se me estén dando bien las cosas.