El partido Morrazo-Liberbank Sinfín del día 24, aplazado por que 14 integrantes de la plantilla gallega tienen covid

El Frigoríficos del Morrazo no podrá jugar su partido contra el Liberbank Cantabria Sinfín, programado para el próximo sábado 24 de octubre en la localidad de Morrazo, por la obligatoriedad de que sus jugadores permanezcan aislados en sus domicilios durante un mínimo de diez días como exige el protocolo sanitario del Servicio Gallego de Salud (Sergas) de la Xunta.

Hasta 14 integrantes del primer equipo, entre jugadores y miembros del cuerpo técnico, han dado positivo en la pruebas PCR realizadas esta semana, por lo que el equipo ha tenido que suspender sus entrenamientos.

Todos los jugadores de la plantilla, independientemente de que hayan dado positivo o negativo, deberán permanecer aislados diez días en sus domicilios, además de someterse a nuevas pruebas de detección de la covid-19 la próxima semana.

Por tanto, la directiva del Frigoríficos del Morrazo ya ha solicitado al Comité de Competición de la Federación Española (RFEBM) la suspensión del partido contra el Sinfín, correspondiente a la décima jornada de la liga Asobal.

En caso de confirmarse, será el segundo encuentro aplazado para el conjunto dirigido por Nacho Moyano, ya que el Frigoríficos ttampoco podrá jugar este fin de semana contra el Ademar León.

El coronavirus está azotando y con fuerza a los equipos de la Liga Sacyr Asobal, que tan sólo podrá celebrar tres de los nueve encuentros previstos para este fin de semana como consecuencia de los casos positivos detectados en varios equipos. Si el martes, la Asobal anunció el aplazamiento por parte del Comité Nacional de Competición de la Federación Española de Balonmano de cuatro de los nueve partidos correspondientes a la novena jornada, el miércoles confirmó el aplazamiento de los duelos Ademar León-Frigoríficos del Morrazo y Fraikin Granollers-Fertiberia Puerto Sagunto.

Además el pasado fin de semana, los jugadores del equipo cántabro ya tuvieron que vivir una extraña situación al tener que jugar el partido ante el Ademar, en León, con las mascarillas puestas.