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No es sencillo. Al contrario, es complicado. Pero ilusionante. Un reto de los que gustan. El Sinfín juega hoy en Huesca con la posibilidad; la esperanza, si se prefiere, de asegurarse matemáticamente la permanencia. No es un objetivo fácil, porque puntuar en la cancha de ... uno de los equipos más fuertes de la Asobal ya resulta difícil. Pero es una posibilidad y sobre todo un motivo de satisfacción para un equipo que ya la semana pasada se aseguró con su victoria ante el Cisne de forma virtual su presencia una temporada más en Asobal. Será la tercera consecutiva y la quinta en los últimos seis años.
El equipo se consolida en la élite. Pero por mucho que las opciones de descenso sean poco menos que estadísticamente aberrantes, siempre conviene llegar a la meta lo antes posible. El desplazamiento de esta tarde, el último de la temporada para los sinfinistas, supone a la vez un reto y una oportunidad que se afronta de la mejor forma posible, porque una derrota, que es lo que indica el guión priorístico, no supondría ningún desastre.
El conjunto cántabro tiene una salida muy exigente, pero tiene algo a favor. Viajará a Huesca para disputar la penúltima jornada de liga y en esta ocasión los santanderinos pueden permitirse el lujo de no ir con la misma presión que en las demás salidas ya que, virtualmente, cuentan con la permanencia. Aún así, saldrán a competir en la difícil pista oscense ante el equipo revelación de esta temporada. Un cuadro que este año lo ha bordado y su clasificación en la tabla, terceros, representa su gran trabajo y esfuerzo.
Los locales cuentan con una gran calidad individual de sus jugadores tanto en defensa como en ataque, que hace que el conjunto sea aún más peligroso, ya que cuando el talento se combina siempre va a más. Es un equipo versátil con jugadores jóvenes y veteranos en la categoría que aportan mucha actividad y alegría a su juego. En cuanto a la defensa es muy agresiva y ejerce una gran presión con pares e impares y con una salida de contraataque en primera y segunda oleada muy potente.
Los pupilos de Montesinos tendrán que ser muy rápidos al repliegue y no perder balones fáciles. El rival en ataque desgasta mucho con su pivote, Montoya, uno de los más determinantes de la categoría en la línea de los seis metros y con jugadores de la talla de Tioumentsev, João Pinto o el veterano Álex Marcelo. Los de negro tendrán que salir a dar todo lo que esté a su alcance en este complicado encuentro para conseguir los máximos goles posibles y también para poder celebrar cuanto antes la permanencia matemática.
Víctor Montesinos contará con bajas ya conocidas como las de Diego Muñiz y Xavi Castro, aunque espera recuperar a ambos de cara a la última jornada de liga, que tendrá lugar contra Villa de Aranda en La Albericia. Por otro lado, el joven Gustavo Alonso ya está recuperado de su lesión y convocado para este partido y otro que también jugará será el macedonio Darko Dimitrievski, si bien será el entrenador quien tenga la ultima palabra para hacerle saltar a la pista. El Liberbank viaja con la ilusión de poder competir y con la mentalidad de estar vivos los sesenta minutos de juego para poder traerse de vuelta lo más positivo para el equipo. El encuentro, que se disputará en el Palacio Municipal de Huesca comenzará a las 16.30 horas
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