Rober Rodríguez agua la fiesta al Bathco

El Benidorm no tardó en enseñar su potencial sobre la pista azul de Asobal y la calidad de los alicantinos fue evidente desde el pitido inicial, con un juego en ataque muy dinámico dirigido por Nacho Valles. Enfrente, la solidez defensiva naranja, con un 6-0 con muchas ayudas y Jaime Gallego como un fortín en el centro de la defensa. Lo cierto es que tan rápido era el ataque alicantino como correosa su última línea, que se vio pronto lastrada por una exclusión de Álvaro Ruiz.

El Bathco se mantuvo muy fuerte en toda la primera parte e incluso llegó a tener una ventaja de cuatro goles, gracias a su potente defensa, a unas cuantas paradas determinantes de Murillo Araújo, sus veloces ataques y la eficacia de cara a puerta, sobresaliendo en este terreno Fabrizio Casanova y los lanzadores desde siete metros, tanto José Carlos Hernández como Martí Villoria.

La primera parte se consumía y el Bathco Torrelavega siguió creciendo con el paso de los minutos. Una nueva exclusión sobre Grau dio superioridad a los naranjas en el tramo final. Inmersos en el último minuto de los 30 iniciales, Álex Mozas solicitó su primer tiempo muerto para dejar que en la reanudación Jorge Prieto recuperase el balón en el último ataque del Benidorm para mantener el 12-10.

En la segunda mitad, el Bathco Torrelavega no pudo jugar al mismo ritmo y los alicantinos aprovecharon el cansancio de los naranjas para estar más cómodos sobre el 40x20, menos desbordados y con opciones de igualar un partido que durante gran parte del tiempo tuvieron perdido. La intensidad del primer tiempo dejó paso a la tensión. Los goles cayeron en ambas porterías igual que lo hacen los golpes en el cuadrilátero, con el único objetivo de dejar cuanto antes al rival tendido sobre la lona.

A falta de cinco minutos el Benidorm, con un Nacho Valles que resultó clave en la segunda parte con sus goles y en el reparto de juego, tomó la delantera en el electrónico ante un impreciso y cansado Bathco que, cargado de fe en sus posibilidades, se mantenía en el partido con un esfuerzo titánico. Los naranjas atacaban con siete, pero el doble fallo desde los siete metros para los torrelaveguenses dejó al Trueba desesperado viendo cómo el partido se alejaba.

Con solo dos minutos por jugar, Fernando Latorre acudió a la mesa para evitar un nuevo pasivo de su equipo. El partido parecía sentenciado con el ataque de Benidorm y Serrano quedándose solo ante Araújo. Pero el brasileño logró el último milagro a falta de diez segundos. Entonces Casanova vio solo a Isi Martínez, que se giró y disparó para ver como Rober Rodríguez desviaba el esférico lo justo para evitar el empate del Bathco en el último partido de la primera vuelta.