El Sinfín entra en coma tras la derrota contra Cangas

Los morracenses tuvieron un arranque fulminante sobre la pista de La Albericia (1-3). Los de Nacho Moyano no dejaban a los santanderinos reestructurarse durante los primeros compases y apostaron por un sólido 6-0 que completaba un efectivo Jorge Pérez bajo el arco de los gallegos.

Los sinfinistas estaban en la obligación de reaccionar y alcanzaron un empate que les permitió equilibrar la situación ante los de Cangas con un seguro Matic Gercar en la portería. El marcador se estancó (4-4) mientras las defensas iban imponiéndose a los ataques, lo que llevó al partido a un paréntesis anotador.

Sin ataques fluidos y claros con errores en el ultimo lanzamiento por parte de Blendio Sinfín y Frigoríficos Morrazo, se rozaba al ecuador de la primera mitad. Entonces Moisés Sime, desde los siete metros, desatascó la situación (4-5) a favor visitante.

Marc López tomó las riendas de los santanderinos para contener las hordas gallegas, pero los de Moyano habían despertado y alcanzaron su mayor diferencia hasta el momento (5-8). Rubén Garabaya paró el juego para retocar el ataque de un Blendio Sinfín que no acababa de encontrar el camino al arco morracense. A pesar de la mejora ofensiva, la inercia jugaba a favor de Cangas, que amplió a cuatro goles su diferencia (6-10). Era el momento de jugársela y el carácter sinfinista salió a relucir, pero los gallegos estaban cuajando una primera parte muy sólida en La Albericia. Jacob Díaz, con una doble diana, intentó mantener a flote a los santaderinos, que llegaron al descanso por detrás en el electrónico (12-14).

El primer golpe de la segunda parte fue para los gallegos de Nacho Moyano, pero el Blendio Sinfín no tardó en empatar (15-15) tras un efectivo inicio que lo metió de lleno en la lucha por la victoria. Parecía que era posible, pero Cangas no estaba dispuesto a vender barata su derrota y reabrió una brecha (16-19) para ponerse de nuevo al frente del marcador en un momento clave.

El Blendio Sinfín, por su parte, apostó por darle los primeros minutos a Mikel Galán vestido de negro, mientras el tiempo jugaba ya en contra de los santanderinos. Los de Garabaya tenían que reaccionar si querían llegar vivos a la recta final del duelo por la permanencia, pero los morracenses retomaron su mayor diferencia en el marcador (16-21). Gercar daba algo de oxígeno a los sinfinistas y paraba todo lo que iba entre los palos de la portería en un momento critico para los locales, pero fue un espejismo. El Cangas dejó finalmente sin opciones a un Sinfín que poco pudo hacer (22-26) y abre una brecha entre los santaderinos y la permanencia muy complicada, en principio, de salvar a falta de ocho jornadas.