El Uneatlántico entra en escena

El Uneatlantico Pereda levanta mañana el telón de la temporada 2023-24 en el Municipal de La Garrofera (17.30 horas) con un partido ante el castellonense Errece Almassora. Las amarillas saltarán a la pista en su segunda temporada de División de Honor Oro con un vestuario lleno de novedades que se amplía hasta el banquillo. Dani González ha tomado las riendas del referente del balonmano femenino en Cantabria. El joven técnico amarillo llega con las ideas muy claras: «El objetivo propio es la permanencia y así se ha fijado desde el club. Queremos asentar un modelo y clasificarnos en la mejor posición posible. Si podemos acabar quintas, mejor que sextas».

Las santanderinas llegan con una plantilla que acompaña esa propuesta que va desgranando González. Un vestuario lleno de caras nuevas y alguna baja importante, como la de Marta da Silva, que cuesta mucho sustituir. «Nos hemos intentado reforzar en todos los puestos, sobre todo por jugadoras jóvenes, aunque también hay alguna incorporación con experiencia, como la de Caterina Benedetti», cuenta Sergio Barquín, el segundo al mando del banquillo amarillo. Para él, las posibilidades del Uneatlántico pasan por un buen comienzo. «A nosotros, por calendario, nos han tocado durante las cinco primeras jornadas recién ascendidos o los que estuvieron peleando con nosotros el pasado curso por la permanencia, así que, una vez pasen, se podrá vislumbrar el alcance real de este equipo».

Varias semanas de pretemporada llegan a su fin con la bocina inicial en Almassora. La Era González comenzará con una nueva propuesta de juego. A los cambios en vestuario, «sobre todo en la primera línea y eso llevará su tiempo para integrarlo» y banquillo se une la «idea de un equipo que pueda recuperar balones en defensa, con posesiones rápidas y que busca todas las opciones posibles e intenta aprovecharlas. Igual no hay tanta brillantez a nivel individual, pero hay que intentar explotar todas las cualidades grupales de esta plantilla», explica el nuevo entrenador amarillo. A las palabras de González se unen las de Barquín. «Este Uneatlántico Pereda va a querer, sobre todo, ganar los partidos desde la defensa. Esa será la clave: hacer una buena defensa y correr mucho y de una forma organizada, ya que quizás en ataque posicional no vamos a tener grandes individualidades».

De la pasada temporada traen unas cuantas lecciones aprendidas y ya no pagarán la novatada que supuso debutar en el segundo escalón del balonmano femenino español. «Hemos aprendido que si se quiere competir y estar en zonas tranquilas o altas de la clasificación hay que competir tanto en La Albericia como fuera», dice Sergio Barquín, «y tenemos que ser más regulares que el año pasado», añade Dani González a la afirmación.

En el vestuario amarillo la confianza en el trabajo que han desarrollado durante las semanas previas al inicio de la competición oficial es «total», cuenta Carlota González, portera y capitana del Uneatlántico Pereda. Nombres como Aldara Valles, Elena San José, Saray Zarzosa o Rocío Parra son algunas de las recién llegadas a la disciplina santanderina para vivir una temporada compleja. «Pensábamos que el año pasado iba a ser superintensa la Liga, pero este año, al haber descendido dos equipos de Liga Iberdrola –la primera división femenina española– creemos lo mismo», explica la meta amarilla. En la plantilla llegan al primer capítulo de la temporada con la lección bien aprendida: «Hay que reforzar mucho el tema de ganar en casa y también fuera para que se nos respete como rivales». El nuevo Uneatlántico Pereda, el equipo cántabro femenino de mayor categoría, ya tiene todo preparado para iniciar una temporada en la que consolidar su proyecto en Oro y seguir soñando.

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