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Ya no son los reyes del baile, pero ya llevan un título cada uno en 2023. Ni siquiera partían como principales favoritos, pero Camargo y Hermanos Borbolla reeditarán El Clásico de los primeros 2000 y se verán las caras el próximo 1 de agosto ... en la final de la Copa Presidenta, una cita que se ganaron ayer tras derrotar a Los Remedios y Casar, respectivamente.
En Muslera, los jugadores de Camargo querían aislarse de la polémica generada por el cambio de fecha del partido ante Peñacastillo y matar dos pájaros de un tiro; por un lado vengarse de la derrota liguera ante Los Remedios y, sobre todo, lograr el pase a la final copera. La historia estaba de su parte, la dinámica de juego de los últimos partidos también, pero la ilusión de una peña modesta por llegar a su primera final de la Copa Cantabria podía mover montañas.
El ímpetu local les sirvió para ponerse por delante en el marcador. Con Carlos Gandarillas en la formación inicial en lugar de Luis Vallines, los locales aprovecharon que Camargo arrancó con dudas para, con un cierre, tomar la delantera. Fue un espejismo, la calma antes de que los de Maliaño desplegasen parte de su poder para dar un giro a la situación y pasar a dominar el partido.
El empate, por un bolo, llegó desde los dieciocho metros con el emboque a la mano, mientras que en el tercero, con el cachi al pulgar como en la apertura, Camargo se lució para acercarse a los 50 palos. Los Remedios, que lo intentó a bolos, perdió sus opciones en el tramo final de la subida. La dinámica era ya para los visitantes, que cerraron la contienda y su pase a la final con la aparición decisiva de Jesús Salmón, que con un emboque derribó la mitad de la madera de la bolada de los suyos en el quinto.
El rival de Camargo en la final será Hermanos Borbolla, que como en sus últimos compromisos ligueros fue de menos a más para apear del sueño copero a Casar de Periedo. Los 'soperos' llegaban cargados de moral tras dejar casi sentenciada su permanencia el pasado fin de semana y, aunque se pusieron por delante, fueron perdiendo fuelle ante el acierto de los visitantes.
Noja optó por el tiro largo, el máximo en el torneo, y ahí sacó ventaja gracias, entre otras cosas, a un emboque de Mario Borbolla en el cuarto parcial que encarriló un triunfo rubricado al matar los 42 palos derribados por Casar. Torrelavega revivirá El Clásico bolístico.
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