«Ojalá podamos repetir la acogida del año pasado»

El objetivo que se han marcado tanto asociación como peña pasa por igualar los 3.352 euros recaudados hace once meses, una cantidad que ha supuesto una ayuda fundamental para el cerca de medio centenar de pacientes que sufre una dolencia que afecta, sobre todo, a los pulmones o el tubo digestivo y que les obliga a tomar más de 50 pastillas al día. «El evento del año pasado le dio un impulso económico, ahora podemos pagar el psicólogo de los afectados, que antes no podíamos, y hemos presentado proyectos nuevos gracias a lo que supuso no sólo en cuanto a dinero, sino también en cuanto a ganas». La salud mental, un tabú que puede parecer un daño colateral, pero que es fundamental para el tratamiento de una enfermedad tan dura como la fibrosis. «Es una dolencia física, que afecta a todos los sistemas del cuerpo, pero eso repercute en la salud mental y eso nunca se ha valorado. De hecho, en las unidades especializadas en fibrosis no hay un psicólogo, por eso tenemos que cubrir ese servicio», aclara Blanca.

Fisioterapia, programas de yoga, de ejercicio físico dirigido o de equitación se añaden a la necesidad de un psicólogo en una Asociación Cántabra de Fibrosis Quística que maneja un presupuesto de cerca de 40.000 euros, por lo que lo recaudado el pasado año supone más del 8% de una cantidad necesaria en el día a día. «Las entidades sin ánimo de lucro vivimos en el día a día, el dinero que se recauda es para el mantenimiento de servicios». Pese a ello, Ruiz vuelve a aclarar. «Con el evento del año pasado cumplí el sueño de poder pagar el psicólogo».

Para Abascal y su peña la jornada tiene una triple finalidad. «Recaudar fondos para la asociación, visibilizar la enfermedad y concienciar a la sociedad de que la solidaridad nos ayuda a ser mejores personas y, a nosotros, una peña con señas de identidad propias». Más allá de esto, el mandatario cañonero reconoce que se ha creado un vínculo entre las partes que ya es indivisible. «Hemos hecho una relación personal con Blanca y con su directiva y nos sentimos muy a gusto. Es una fecha complicada, porque es pretemporada, pero no puede ser en otro momento». Con todo, para José Antonio lo más destacado y lo primero a repetir es «la repercusión y acogida que tuvo el evento».

Para este año la peña Riotuerto ha querido ir más lejos y la segunda edición pasará de una jornada a dos e incluirá un partido femenino entre las selecciones cántabra y española. Será el domingo 18 de febrero, unas horas más tarde de un sábado 17 en el que habrá desayuno pasiego, concurso de birle, blanqueo, partido entre la peña local y la selección cántabra, conciertos y barbacoa. Una jornada para todos los públicos y gustos que se presentará el viernes en el Hotel Villa Pasiega.

Bolos y solidaridad, una dupla a menudo unida en fechas navideñas y que, más allá de la labor social que supone para los que reciben las ayudas generadas, implica una oportunidad para poner en valor al deporte regional. «Los bolos no están sobrados de eventos de este tipo, últimamente sólo salimos en los medios por los problemas que hay, porque somos gente complicada, pero cuando nos unimos también hacemos demostraciones de buena convivencia».

Unidos o no, los bolos y la peña Riotuerto quieren demostrar que cuando se ponen no tienen rival, por eso La Encina se convertirá en una fiesta.