La Reserva del Saja mantiene un ritmo alto

Los motivos de estos buenos resultados son, como casi siempre en la caza, de lo más diverso. Y es que hay opiniones para todos los gustos. Desde los que piensan que se trata únicamente de una casualidad, a los que consideran que la abundancia de jabalíes en los montes es un factor clave, pasando por los que creen que las jornadas de perreo que se han dado en los últimos meses han permitido que los actores principales en las batidas de jabalí, los perros, hayan comenzado en muy buena forma y eso es algo que siempre se deja notar. Sea cual sea el motivo, lo cierto es que la temporada ha comenzado con unas cifras que muy pocos podían aventurar hace apenas un mes, algo que hace concebir esperanzas de que esta campaña pueda obtener a su fin el calificativo de brillante.

Por lo que respecta al último fin de semana, en el que sólo se contabilizaron cinco ceros, la comarca que ofreció un mejor rendimiento fue la de Cabuérniga. Y es que en las cuatro cacerías que se celebraron en sus límites se completó el cupo de tres jabalíes fijados por la Administración para esta zona. El sábado, la cuadrilla de Luis Gutiérrez consiguió volverse para casa con tres ejemplares del lote de Candanoso. Lo mismo hicieron los de David Gutiérrez en La Cotera. Un día después fueron las cuadrillas de Manuel Jesús Sánchez y de Isidro López los que lograron el pleno en los montes de La Miña y Serradores, respectivamente.

Tres plenos (dos jabalíes) se alcanzaron en la comarca del Nansa. En concreto fueron en Frente y Navas, donde cazó el grupo de María Ángeles Molleda; La Cestera, lote que tocó en suerte a la cuadrilla de Juan Carlos Díaz; y El Táladro, donde actuaron Rodrigo Pérez y los suyos. Un ejemplar se cazó en Caviña a cargo de la cuadrilla de Isaac García.

En la comarca campurriana hubo un cupo, el logrado por la cuadrilla dirigida por José Manuel Gutiérrez en Palombera Oeste. En el monte de Milagro el grupo de José Manuel González abatió dos suidos. En otras tres batidas se tocó pelo: Izara (Luis Felipe Martín); La Grajera (Ignacio Cosío); y Abiada (Luis Alberto Cano).

Liébana, en volumen total, fue la más productiva. Seis se cazaron en Panda Carrielda a cargo de la cuadrilla de Miguel A. Pacheco. Cinco en Sobreiglesias gracias al acierto de Emilio Casares y los suyos. Tres en Cuesta Bernizo (Jairo Posada) y dos en Arretuerto (Jaime Parra). Uno en Poda Cordancas (Jaime Guerrero) y otro en La Hoyona (Rufino Alonso) completaron la cuenta en esta zona.

Por último en la comarca de Valdeiguña, la única cacería que tuvo un resultado positivo fue la que disfrutó la cuadrilla de Fernando Pablo Ceballos en el monte de Coo.