La Reserva vuelve a coger impulso

Los montes lebaniegos fueron el gran motor de la jornada. Porque en solo tres de sus lotes se cazó más de la mitad de la cantidad total del fin de semana. La palma se la llevó Panda Carrielda, que protagonizó un sonoro pleno. Los cazadores de la 52, que dirige José Santos del Hoyo, abatieron a los diez cerdos salvajes que se pueden cazar en los montes de esa comarca. A uno de la mayor cifra posible en la Reserva se quedaron los integrantes de la 55 que lidera Domingo Bueno. En Arretuerto atinaron con nueve suidos. Con uno menos, ocho, se bajaron de Dobra Regaos los cazadores de la 35 que capitanea Jaime Parra.

Canaluco, en el Nansa, con cuatro cochinos -cuadrilla 6, que manda María Ángeles Molleda-; y el Candanoso y Mozagro, en Cabuérniga, con tres suidos para las cuadrillas 43 -Fernando González- y 154 -Francisco Manuel Landeras- también protagonizaron un pleno el fin de semana.