El Acrog manda en la Vuelta al Besaya

El Acrog hizo valer su condición de equipo más fuerte desde el primer sector, una crontrarreloj por equipos en Las Fraguas en la que los flamencos volaron para recuperar el maillot amarillo. Marcaron, con diferencia, el mejor tiempo. Exhibición. Y, por detrás, el MMR Academy de Markel Beloki se postuló como su principal rival para el triunfo definitivo en la ronda. Buena actuación también del equipo cántabro Isidoro San Justo, que plantó cara entre los favoritos.

Ya por la tarde, más batalla, con un segundo sector en línea de 74 kilómetros. Explosivo y exigente. Con la subida a La Braguía y un final propenso a emboscadas en las cuevas de Puente Viesgo. A eso había que añadirle las altas temperaturas en el interior de Cantabria. Hasta 34 grados en la zona de Villacarriedo.

Justo después de ese paso, ya en las rampas de La Braguía, comenzaron los intentos de fuga. El más reseñable, el del líder de los sprints especiales, Luis Alberto Lajarín, del Valverde Team, y Daniel Tenorio, del GSports. La dupla alcanzó la cima y llegó a poseer una renta de hasta 45 segundos sobre un pelotón siempre controlado por el impenitente Acrog. Sin poner el ritmo de caza pero sin soltar la cuerda a los fugados, sabedores del complicado final de la jornada en Puente Viesgo. Así, cual martillo pilón, la escuadra belga echó abajo la escapada cuando la carrera ya había pasado Borleña. A unos quince kilómetros para la línea de meta.

Y llegó la ascensión definitiva a las cuevas. Con el equipo patrón por delante. Hasta el propio De Bock, con su amarillo reluciente, asomó la cabeza entre la multitud para marcar el ritmo y explicar a sus rivales sin palabras que de ahí no se movía nadie.

Sólo dio su consentimiento a falta de 400 metros, cuando ya no había peligro de volver a perder el liderato. Fue el momento en el que los aspirantes al triunfo lanzaron el sprint final. Y fue el extremeños del Team Vino-Electromercantil, Pablo Lospitao, el más rápido entre las rampas. Por delante de los corredores del Torrent, Adrià Pericas y Marc Zafra.

Este domingo llega la etapa reina y última de esta Vuelta al Besaya. Y, pese a la muestra de poderío del Acrog, mucho por hablar todavía. 110 kilómetros entre Torrelavega y Los Corrales de Buelna, con una subida al Alto de Hijas de la que nunca se espera mucho, pero que calienta las piernas. Pero también con el encadenado de los collados de Brenes y Cieza, este último, a catorce kilómetros de la meta. Con esos ingredientes, se verán las caras el pétreo bloque flamenco con el talento cuando la carretera se pone pindia de Markel Beloki, principal rival de De Bock e incluso, con sus quince segundos de desventaja, aún favorito a hacerse con la general final de la ronda cántabra.