Cantabria, de puerto en puerto

«Es un reto, porque las posibilidades de fracasar son mayores que las de tener éxito». Borja Ortiz (Santander, 1978) no es la primera vez que se ve inmerso en una 'locura' personal. Ya fue nadando desde Santander a San Vicente de la Barquera (55 kilómetros), de Castro a Santander (52) o se cruzó en esquís de travesía desde Los Tornos a Potes (150). Esta vez lo hace para ayudar a la Asociación de la lucha contra el Cáncer. «Si puedo ayudar pues bien», añade sutilmente. Ortiz saldrá hoy desde Castro Urdiales (12.00 horas) y después de recorrer 900 kilómetros, ascender 31 puertos y superar 20.000 metros de desnivel espera cruzar Cantabria de puerto en puerto y llegar a Potes. «Quiero llegar el jueves por la noche, después de pedalear tres días y dos noches», confiesa.

A este socorrista le mueve «la superación personal, ni más ni menos. Convencer a la gente de que si la mente quiere, el cuerpo le sigue». Le acompañará el tricampeón del mundo Óscar Freire durante parte de su recorrido. «Se sumará el miércoles -mañana-, sobre las 10.00 horas y subirá conmigo Lunada y Estacas. Se lo comenté y me dijo que le gustaba la idea». Ahí es nada. Para cuando el genio del Barrio de Covadonga le dé conversación, Ortiz ya llevará quince puertos de montaña y cerca de 20 horas pedaleando. Su intención es empezar por la Muñecas, Escrita... Así, puerto a puerto. La primera noche subirá Peña Cabarga, Alisas y Los Machucos. Mañana, sus previsiones apuntan a que por la noche llegará a Reinosa y por tanto le tocará subir El Chivo, Palombera y Carmona a oscuras. Para el jueves tienes reservado el resto de las colladas, Piedrasluengas, San Glorio y Fuente Dé. Le acompañará en todo momento un coche de asistencia de Kronos Bike, que «ha querido colaborar conmigo en este proyecto y a los que les doy las gracias».

Ortiz llegará «si todo va bien» cuando la noche caiga en Potes. Allí le estarán esperando los miembros de la Asociación de la lucha contra el Cáncer y el alcalde de Potes. «Quiero pensar que no hay que rendirse nunca. Puede salir mal, pero hay que superarse hasta el final y luchar por tus sueños». Que comience el reto.