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Morgado fue sin paliativos el patrón de la Vuelta al Besaya. El ciclista portugués se llevó la general con total merecimiento, defendiendo su liderato desde el primer día hasta este domingo, en la última y definitiva etapa reina de la ronda, donde Nil Aguilera (Eolo), ... ganador en la meta de Los Corrales y segundo clasificado en la general final, apostó al todo o nada en las rampas del definitivo Collado de Cieza.
Morgado repite victoria en la ronda, después de que se alzara con el triunfo en la edición de 2021, demostrando un dominio abrumador en todos los terrenos. Además, se lleva para Portugal dos etapas, la general de la Montaña y la de la Regularidad. Incontestable. Al luso le acompañaron en el cajón Nil Aguilera, a diez segundos, y Nil Gimeno (MMR), a 42 segundos.
La de este domingo fue la etapa más exigente y los ciclistas lo sabían. En la salida de Torrelavega se podía palpar. Todo por decidir y con la sombra de la sanción a Morgado del día anterior –por aprovecharse de la estela del coche– que aún estrechaba más la clasificación. Por delante 110,4 kilómetros con el Alto de Hijas, el de Brenes –el techo de la Vuelta, y el siempre definitivo Collado de Cieza. Se voló a una media cercana a los cuarenta kilómetros por hora de media, a pesar de la dificultad. Hubo respeto hasta las rampas de Brenes, donde el equipo Bairrada rompió la carrera y donde el líder, Morgado, respondió en primera persona a los ataques y coronó en primer lugar. Con la selección ya hecha se llegó a las faldas de Cieza. La lluvia dio tregua y no apareció. Comenzaron el puerto Morgado, Aguilera, Pau Martí, Iñaki Navarro, Mario Serrano, Martínez Huertas y Hugo de la Calle. Y desde abajo Aguilera apostó a ganador. Solo le siguió Morgado y juntos hicieron camino. Por detrás, Serrano, Navarro y Martí comenzaron una persecución estéril. Mantuvieron una desventaja de alrededor de 30 segundos, mientras sufría Gimeno un poco más rezagado por aspirar a la tercera posición en el podio. Así se llegó a la cima y se lanzaron para abajo en un descenso rapidísimo y sin margen para el despiste.
Morgado y Aguilera pronto llegaron a un entendimiento y a un pacto entre caballeros. Para el portugués la montaña y la general y para el atrevido escalador de Eolo la gloria en la meta de Los Corrales de Buelna. Así fue. Ambos levantaron los brazos celebrando cada uno lo suyo. Por detrás entraron a quince segundos el trío perseguidor y a 17, Hugo de la Calle y Nil Gimeno, que lograba así acceder a la tercera posición y subir al podio final. Los dos también lo celebraron en la línea de meta.
También entraron de la mano Gonçalo Tavares y Daniel Lima, los dos gregarios de Morgado que le ayudaron mientras les tocó y que también hacía suya la victoria de su líder. El damnificado de la última etapa fue el corredor del Bathco, Estanislao Calabuig, que partió como segundo en la general y acabó a 6.36 del ganador. Una lástima para un corredor combativo y que tuvo un día malo en las rampas de Brenes y Cieza.
El primero de casa fue Isaac Gracia (Bathco) y el triunfo por equipos fue para la escuadra portuguesa del Bairrada, que demostró una estrategia perfecta y sus piezas funcionaron como un reloj. La Vuelta al Besaya salió perfecta, como es costumbre: «Puedes estar tranquilo, Paco Ruiz, allá donde estés. Tu micrófono sigue abierto».
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