Un pinchazo en la parte final retrasa a Kevin Suárez en Bélgica

Overijse es uno de los templos del ciclocross en un país, Bélgica, en el que la especialidad de las bicis sobre barro es como el fútbol en Argentina o el rugby en Nueva Zelanda. Casi más que una religión. Considerada como 'la madre de todas las carreras', está en el calendario ciclista desde el año 1960 y es ya considerada como una de las clásicas del ciclocross. Un circuito exigente, con algún tramo de pavé y barro, producto de las lluvias del fin de semana en esa zona, esperaba a los participantes.

En la primera vuelta al circuito, Kevin Suárez marcaba un registro de nueve minutos y siete segundos. Los cronos del corraliego se mantuvieron en esa línea hasta el cuarto giro, en el que realizó un crono de 9.46. Suárez recuperó algo de tiempo en las dos siguientes vueltas. Pero en la última llegó ese inoportuno pinchazo que le impidió pelear por escalar, al menos, un par de posiciones, respecto al checo Michael Boros y el francés Antoine Huby.

El otro español en la prueba masculina, el valenciano Felipe Orts (Burgos BH) ocupó el vigésimo primer puesto de la clasificación. En la prueba femenina, Lucía González fue vigésimo cuarta.