El deporte base regresa en plena tercera ola

El regreso del deporte base no ha sido sencillo y, además, puede resultar muy breve. Después de que se ha dado luz verde al regreso a los entrenamientos justo cuando Cantabria acaba de entrar de nuevo en el nivel 4 de alerta, el máximo por covid. Según ha podido saber El Diario Montañés, ya en diciembre, la Dirección General de Deportes trató de aprobar ya en diciembre un regreso escalonado, pero se encontró con la negativa de Salud Pública. Lo volvió a intentar para este mes de enero, pero en la última reunión celebrada antes de la publicación del BOC extraordinario del lunes volvió a encontrarse reservas. Así lo que aspiraba a que fuera un regreso a los entrenamientos tanto en ámbitos al aire libre como en pista cubierta se ha convertido en sesiones restringidas a grupos reducidos (un máximo de seis no convivientes) y en espacios abiertos.

El relevo en la Dirección General de Salud Pública trajo este pequeño cambio, pero también un apunte: se iba a aprobar el regreso con cifras peores de las de meses atrás, cuando el deporte base estaba prohibido. De ahí la estricta limitación que ha impuesto Sanidad, que tampoco permitirá por el momento que se celebren competiciones oficiales de menores escolarizados frente a un planteamiento inicial que era otro.

En apenas dos días, los ayuntamientos, clubes y federaciones han recogido el testigo y han comenzado a reorganizar la actividad. El lunes el Atletismo Selaya y este martes el Marina de Cudeyo fueron dos de los primeros. La mayoría lo harán a lo largo de esta semana. En Polanco, por ejemplo, se reanudan hoy los entrenamientos para federados de fútbol y atletismo tanto en el campo de Rinconeda como en la pista de Requejada.

Ambos deportes, fútbol y atletismo, son los grandes beneficiados de esta medida. Es más, los primeros ya barajan el 27 de febrero como fecha de regreso de la competición en categorías menores. El resto de federaciones optan por esperar al menos unas semanas para plantearse el regreso oficial de las ligas y torneos en el deporte escolar.

El Marina de Cudeyo es uno de los primeros clubes de fútbol en volver a los entrenamientos. El lunes lo hicieron los porteros, este martes los jugadores. José Beitia, presidente de la entidad, reconoce que han tenido que hacer ajustes. «Hemos reducido un cuarto de hora los entrenamientos para que no se crucen los grupos al entrar y al salir. Como no hay duchas ni vestuarios ni nada, hasta que unos no han acabado, los otros no salen del coche», cuenta.

En su caso, «hay que firmar unas autorizaciones de la Federación y de Sanidad, en las que los padres se hacen responsables de que no llevarán a sus hijos con síntomas y una serie de normas más para cumplir». En el campo de San Lázaro, en Pontejos, donde entrenan, no tienen ningún problema para cumplir las medidas de seguridad e higiene establecidas por la autoridades, relativas al mantenimiento de una distancia mínima de seguridad de metro y medio, limpieza de manos e higiene respiratoria.

Más problemas se han encontrado en el hockey. Alejandro Siri Pérez, director técnico del Sardinero, reconoce que «la idea inicial es comenzar esta semana». El problema al que se enfrentan es que en el Complejo Municipal Ruth Beitia de Santander hay dos campos para que entrenen el Sardinero, el Tenis y la Escuela Municipal de Deportes. En su caso , «estaba organizado, pero el toque de queda nos recorta hora y cuarto de entrenamientos, así que ahora mismo estamos negociando las tres partes para acomodar los horarios y que todas las categorías puedan entrenar», explica.

Compartir instalaciones o reajustar los horarios son los dos problemas principales que se han encontrado las entidades deportivas a la hora de comenzar sus entrenamientos con la base. Así todo, hay clubes como el Atletismo Torrelavega que, al igual que los futbolistas del Marina de Cudeyo, cuentan con un recinto -en este caso el Complejo Municipal Óscar Freire- que no comparten con nadie más y eso les permite reiniciar una rutina sin tantos cambios. En su caso, los sub 16 iniciaron este martes la preparación en pista. «Sí tenemos organizadas las entradas y salidas para que no coincidan, pero más allá de los protocolos marcados no hay que hacer ningún ajuste añadido», cuenta Héctor Sánchez, presidente de la entidad. En el caso del atletismo, los calendarios vigentes son para las categorías superiores a sub 16, así que no parece que el reinicio de la competición esté prevista a corto plazo.

La «incertidumbre» es el principal rasgo que esgrimen desde los clubes cántabros para definir el reencuentro de los menores con el deporte, mientras que coinciden en destacar que hay ganas para sacarlo adelante.

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