Cuando a los futbolistas se les va la boca

El pasado sábado volvió a ocurrir en el encuentro de la 'FA Cup' inglesa entre el Everton y el Chelsea, que clasifió al primero para las semifinales de la competición copera. La frustración de los 'blues' quedó reflejada en la imagen del jugador hispanobrasileño Diego Costa, que no se le ocurrió otra cosa que simular un mordisco en el cuello a un rival, el inglés Gareth Barry, quien después declaró que el internacional español no llegó a morderle en ese encontronazo. Sea como fuese, Costa se llevó su segunda tarjeta amarilla por ese arranque de ira y fue expulsado cuando quedaban cinco minutos oara el final.

Pero los malos modos de Costa ya habían empezado al comienzo de ese partido, cuando el árbitro le amonestó por primera vez tras dar un codazo en la nuca al propio Barry en un choque aéreo. El colegiado indicó falta del delantero del Chelsea y este rápidamente se puso a protestar a pocos centímetros de su cara. Cuando terminó de quejarse y ya se estaba marchando, Costa se giró para escupir en los pies del árbitro. El colegiado pareció no percatarse de ello y su reacción no fue castigada. La Federación inglesa todavía ya ha dicho que le pueden caer tres partidos por sus acciones y posterior expulsión.

Costa ya fue sancionado esta misma temporada tras agredir a Laurent Koscielny en el Chelsea-Arsenal. El exjugador del Atlético dio varios manotazos en la cara al central francés, lo que provocó una tangana entre los jugadores de ambos equipos, aunque al final el único expulsado del partido por este incidente fue el brasileño de los 'gooners' Gabriel Paulista. Pero la Federación vio la imágenes, entró de oficio y Costa fue castigado con tres partidos de suspensión por conducta antideportiva. Tras esta fea acción, incluso el seleccionador español, Vicente Del Bosque, paradigma de los buenos modos y la moderación, recriminó la acción de Costa. "No me gustó lo que hizo", dijo Del Bosque.

Pepe también pierde los papeles

Pero no es Costa el único que pierde los papeles en un campo de futbol y cuando millones de espectadores están mirando. En un 'amistoso', por llamarlo de alguna manera, entre el Real Madrid y la Roma, el madridista Pepe y el exbarcelonista Keita ya la tuvieron en los saludos previos al partido. Keita negó el saludo a Pepe debido a que, supuestamente el madridista le había llamado 'mono' dos tres años antes. Según unas imágenes de televisión Pepe escupió a Keita después de este no le saludo y posteriomente el jugador de la Roma le tiró una botella de agua al madridista. Aquello acabó con los jugadores de ambos equipos metidos en una tangana vergonzosa, aunque no hubo ninguna sanción para nadie. Pepe se tiene ganada la fama de jugador antideportivo. No fue por escupir, pero en 2012, el comité de Competición le impuso una sanció de cuatro partidos por llamar "hijo de puta" al árbitro. Competición consideró que sus palabras un no fueron "insulto", sino un simple "menosprecio". Y el madridista tuvo que estar 10 encuentros sin jugar cuando dio varias patadas a Casquero, un puñetazo a Albín e insultó repetidamente al árbitro en el partido ante el Getafe de hace siete años. Las imágenes del vídeo fueron las que le condenaron.

Antecedentes graves

Ha habido otros futbolistas que han escupido a rivales o al propio árbitro y aunque sus sanciones, no han llegado a ser tan severas como la que le impuso la FIFA a Luis Suárez (nueve partidos y cuatro meses sin jugar) por morder a un rival en el pasado Mundial de Brasil, sí que han diso consideradas disuasiorias. El iraquí Samir Shaker Mahmoud fue sancinado un año por escupir al árbitro colombiano 'Chucho' Díaz en el Mundial 86. La FIFA actuó de oficio.

Raúl Meireles, futbolista portugés del Fenerbahce fue castigado con once partidos por escupir e intentar agredir al colegiado en un choque ante el Galatasaray. Vio la roja directa en ese partido y el castigo posterior se lo puso la federación turca.

El colombiano Efraín Cortés recibió una sanción de seis partidos por escupir a un rival en el partido del Torneo de Apertura de la Liga Mexicana en 2014.

La comisión de disciplina de la Unión Rusa de Fútbol (RFU) castigó con seis partidos de suspensión al defensa del Tomska Vladimir Kisenkov, por escupir al árbitro del partido contra el Terek Grozny.

El jugador serbomontenegrino del Lazio Sinisa Mihajlovic recibió una sanción de ocho partidos por escupir al delantero del Chelsea Adrian Mutu en un encuentro de Champions en 2003, además de una multa de 12.700 euros por reincidente, pues dos temporadas antes salió su lado más racista e insultó al jugador del Arsenal Patrick Vieira. Mihajlovic es hoy en día entrenador del AC Milan.

A Francesco Totti le cayeron cuatro partidos por escupir al danés Christian Poulsen en la Eurocopa de 2004 (fue sancionado de oficio por la UEFA) y otros cuatro por agredir sin balón y de forma intencionada a Ballotelli en 2010. Totti dijo: "Le di esa patada porque es un provocador nato, me insultó dos veces, y se metió con la ciudad de Roma".

Otro de los escupitajos recordados es el que José Luis Chilavert, en su día capitán y portero de Paragüay, le propinó al brasileño Roberto Carlos cuando se enfrentabas sus selecciones en la fase final del Mundial de Corea y Japón. A chilavert le cayeron cuatro partidos por que tuvo que cumplir en la fase clasificatoria para el Mundial de 2002, pero esta fue rebajada posteriormente.