La Audiencia condena a Vilar a dos años por apropiación indebida cuando presidía el fútbol cántabro

La Audiencia, que ha juzgado a Vilar por sus tres últimos años al frente de la Federación –no existe la documentación de los 19 anteriores– le considera «autor de un delito continuado de apropiación indebida agravada, con atenuante muy cualificada de dilaciones indebidas», y además de la pena de privación de libertad y la indemnización le condena a una multa de 2.100 euros (siete meses a razón de diez euros diarios), las costas y le inhabilita para el sufragio pasivo durante los dos años de condena. «El acusado, aprovechando su posición en la Federación, con intención de obtener un ilícito enriquecimiento, dispuso de dinero de la citada entidad para su propio interés personal», se resume en los hechos probados de la sentencia.

La sentencia pone fin a un largo proceso de depuración de responsabilidades que se puso en marcha en 2012, cuando el actual presidente, José Ángel Peláez, sustituyó a Vilar al frente de la territorial. Casi una década han tardado en pronunciarse los tribunales, hasta el extremo de que las constantes dilaciones han constituido un atenuante que incluso la acusación particular aceptaba ya al comienzo del juicio oral.

Durante la vista oral celebrada en la Sección Primera de la Audiencia el pasado mes de enero, se juzgó la gestión de Vilar solo durante tres de los 22 ejercicios durante los que presidió la Federación Cántabra de Fútbol, puesto que no se dispone de la documentación del resto. Según los testigos, aunque esto no figura entre los hechos probado en la sentencia –tampoco se juzgaba–, el expresidente encargaba tareas personales a los trabajadores de la FCF, el propio Vilar ordenó destruir documentación, de modo que a su relevo no fue posible investigar pormenorizadamente las cuentas anteriores a 2010.

La Audiencia ha hecho suya la pena de prisión solicitada por la Fiscalía, que en sus conclusiones consideró a Vilar culpable de un delito de apropiación indebida «agravado por la cuantía» y solicitaba además una indemnización de 151.120,07 euros. Más pedía en su escrito la acusación particular: cuatro años y nueve meses de prisión por dos delitos, ambos de apropiación indebida, y una indemnización de 140.955,65 euros. Y todo a pesar de las modificaciones que incluyó en su escrito para rebajar los siete que demandaba originalmente.

El tribunal considera probado que Vilar, presidente de la Federación Cántabra de Fútbol de 1990 a 2012, cobró dietas indebidas, cargó gastos personales a la Federación, ordenó que se le sufragaran cuatro planes de pensiones sin que lo autorizara la asamblea y cargó al ente el seguro del hogar de su vivienda. Además, concluye que su hija, Eva Vilar, que trabajaba para la Mutualidad de Futbolistas, organismo dependiente de la FCF, recibió un préstamo personal de la Federación que pagó con las dietas que le abonaba el propio organismo, para el que estaba contratada, si bien aclara que «no consta intervención del acusado en tal actuación». No considera, sin embargo, probado que se beneficiara de la reventa de entradas de la selección española, como también señalaron algunos testigos.

El relevo en la Federación se produjo en 2012 y el proceso judicial comenzó hace más de ocho años, en concreto el 7 de octubre de 2013, y siempre se ha referido únicamente a los tres últimos años de Vilar en el puesto, puesto que el resto de la documentación había sido destruida cuando el nuevo equipo federativo tomó el relevo.

90.000euros de indemnización deberá pagar a la Federación

Además de diferentes gastos de floristería, ferretería y otros aspectos, la Audiencia se muestra contundente en cuanto a los seguros: «En lo que se refiere al pago de la prima anual de los seguros particulares de la vivienda del acusado durante varios años, no ofrece duda que estaban domiciliados en la cuenta de la Federación, que se abonaron con los fondos de esta durante tres años –2010 a 2012– y que, aún en el año 2012, una vez que dejó de ser presidente de la Federación, el acusado procedió a devolver el dinero que importaba la prima de tales seguros.

El acusado ha alegado en todo momento que se trató de un error del corredor, lo que no cuenta con aval alguno», señala respecto a los seguros, antes de añadir que «no ofrece duda que el acusado tenía que ser perfecto conocedor de que él no abonaba con su peculio particular cantidad alguna por el seguro de su vivienda propia, más aún cuando tal situación se prolongó durante varios años». Respecto a los planes de pensiones, concluye que «se constituyeron de manera no legal en 1999, al no contar con el respaldo del órgano que debía autorizarlo».

22años estuvo Vilar al frente de la Federación Cántabra de Fútbol

Durante las testificales, diferentes empleados de la Federación sostuvieron que en su mandato Vilar les empleaba para labores personales. Además, el actual equipo directivo de la Federación sostiene que el quebranto a la institución ha resultado millonario, si bien el resto de ejercicios no se juzgaba en la sala al no existir documentación ni haberse formulado acusación formal en este sentido.

De acuerdo con la Fiscalía, durante el periodo 2010-2012 Vilar se enriqueció por valor de 139.884 euros: 16.257,64 en dietas y facturas, 24.434 por venta a terceros de entradas de la selección española –esto no se considera probado– y 99.193 en planes de pensiones. Esta práctica es el pilar fundamental de la acusación, y la Audiencia la ha dado por probados los citados planes de pensiones.

Sobre los planes de pensiones la sentencia señala: «En cuanto a Axa Plan de Ahorro, el importe recibido se corresponde con el total de las primas pagadas más la leve revaloración: 20.259,81 euros». Con esta compañía suscribió otro plan que también desglosa el documento: «Si las aportaciones suman 62.438,44 euros y lo devengado a su favor, 69.188,55 euros, ello supone una revaloración global del 10,81% atendido el total de las primas abonadas. Esto es, que el beneficiario recibió las cantidades aportadas más la rentabilidad obtenida en ese porcentaje. En la misma proporción, correspondería a las aportaciones de la Federación, 56.774,12 euros, que es la cantidad que deberá ser devuelta».

3ejercicios, los tres últimos, son los que se han podido juzgar. Del resto falta documentación

En la póliza de Winterthur «se produjeron aportaciones por parte de la Federación por importe de 51.235,56 euros. Alberto Vilar solicitó en mayo de 2007 el rescate de las mismas, percibiendo la cantidad neta de 59.502,50 euros, correspondiente a 69.188,55 brutos».

En lo referido a «los planes de pensiones con Catalana Occidente, se ha tenido por acreditado el pago con cargo a la Federación Cántabra de Fútbol por importe total de 3.966,71 euros. En el presente caso, se desconoce el importe de las aportaciones en relación con la rentabilidad final obtenida por el plan, pues se carece de datos a tal fin, por lo que será únicamente reembolsable el importe de las aportaciones. El Ministerio Público introdujo modificaciones en su escrito de calificación provisional acerca de distintas cuantías relacionadas con los ilícitos enjuiciados, en los ejercicios 2010, 2011 y 2012. En sus conclusiones aprecia «delito agravado» y también las circunstancias atenuantes de «dilaciones indebidas».

Vilar deberá decidir ahora si recurre ante el Tribunal Supremo o si por el contrario acepta la condena, que cerraría así definitivamente el largo proceso que siguió a dos más de dos décadas de poder plenipotenciario en la Federación Cántabra de Fútbol.