La asamblea federativa rechaza que no haya descensos en el fútbol modesto cántabro

Finalmente habrá descensos, en el fútbol regional, no en la Segunda División, obviamente, pero sí en la Primera y en la Regional Preferente. La votación de este lunes fue tajante: 21 votos a favor de que hubiese descensos, ocho en contra y cuatro abstenciones. Se optó por la normativa aprobada al principio de la temporada por la que si se jugaba más del 50% de la competición habría descensos irremediablemente. Así las cosas, en la Segunda Regional se dará por finalizada la competición en el momento que acabe la primera vuelta; ascenderán los dos primeros de cada grupo, mientras que los segundos, terceros y cuartos jugarán una eliminatoria cruzada contra los del otro grupo. Será a ida y vuelta. Los que ganen, ascenderán. De la misma manera, en Primera y Regional Preferente, se utilizará el mismo formato; los dos primeros de cada grupo ascienden directamente y los segundos y terceros clasificados se jugarán el resto de plazas en un play off cruzado con el otro grupo a un partido y en el campo del mejor clasificado.

La fórmula parecía que no iba a encontrar oposición, sin embargo al no haber descensos se podría perder la tensión de algunos competidores y finalmente la propuesta no salió adelante. Es evidente que la situación actual, con un parón de más de tres meses –la suspensión en exteriores concretamente fue publicada en el BOC el 29 de octubre– y con una continua incertidumbre obligaba a replantearse todas las competiciones y de ahí que los responsables federativos y los miembros de los distintos clubes se vieran obligados a reinventarse.

La Federación sondeó con anterioridad a las entidades para alcanzar un formato que pudiera satisfacer a todos e ideó un sistema en el que no se contemplaran los descensos, pero se rechazó y ahora de lo que se trata es de que la pandemia de un respiro y permita cumplir con lo programado.

Por lo que respecta al fútbol base, como ya anunció el presidente de la Federación Cántabra, José Ángel Peláez, «no se contará esta temporada 20-21 y por lo tanto no habrá descensos ni ascensos, quedando todos los equipos en las categorías que tenían de haberse iniciado la temporada 20-21». Tan solo habrá una excepción, en la categoría juvenil donde habrá dos ascensos.

No obstante, como este lunes quedó aprobado en la votación será imprescindible inscribirse por parte de los clubes. «En el caso de que haya equipos que no se inscriban en la FCF, eso sí, perderán la categoría que tengan actualmente». No da tiempo a terminar la competición como tal según la Federación, por lo que se abogará por rescatar una modalidad de «campeonato tipo Champions o como lo que era el antiguo Barrios», explicó el presidente. Este torneo arrancaría el 27 y 28 de marzo si las restricciones se mantienen y no se vuelve a empeorar.

El fútbol base ha estado parado totalmente más de tres meses, en los que ha habido clubes que ni tan siquiera han podido entrenar. Así las cosas, los jugadores que quieran participar abonarán la cuota de licencia completa antes del 16 de marzo y se le descontará la próxima campaña la parte proporcional. «Si por ejemplo se pagan 60 euros, el campeonato normal es de 30 jornadas y se disputan 12, en ese caso se le descontarían 36 euros de la temporada próxima», añadió Peláez en un intento de aclarar la decisión que afectará al deporte base.

Finalmente, como ya adelantaron las páginas de El Diario Montañés, puede darse el caso de que haya clubes que no quieran formar parte de la competición, pero sus jugadores hayan pagado el primer plazo de la cuota de la licencia. En ese caso podrán seguir entrenando hasta el final de temporada, siempre y cuando tramiten su licencia sin necesidad de abonar nada más.