El Charles ya está de vuelta

Tras el golpe del descenso hace un año, la readaptación a Tercera RFEF no fue sencilla. El curso arrancó con Iñaki Zurimendi en el banquillo, sustituido a mediados de diciembre por Gutiérrez Tagle, que dotó al equipo de solidez defensiva, mordiente, estabilidad y una regularidad en los resultados que encarrilaron el apurado ascenso en la promoción.

El equipo pejino ha cambiado mucho. Subi jugará esta temporada cedido en el Sámano y se han incorporado nueve futbolistas: Peña, Maza, Oliver, Arriola, David Sanz, Oscar Santiago, Dani Ojeda, Isuardi y Vassilakis. «Hemos intentado mantener el bloque del año pasado y traer jugadores de mucha disposición que nos aporten ese puntito extra de calidad que necesitamos uniendo juventud y experiencia», indica Manu del Valle.

El técnico del cuadro pejino considera que la pretemporada «ha ido bien en cuanto a resultados, ya que nos hemos enfrentado a equipos de todo tipo. Podemos decir que ha sido positiva también en cuanto a actitud». También se muestra satisfecho con los jugadores que han llegado al equipo:«Estoy contento con los que se han quedado y los que han venido», dice el míster, «muy ilusionado» ante la temporada que se avecina en muchos campos «históricos» y con mucho nivel». «Tendremos que ir al límite en cada partido», reflexiona consciente de que el equipo tendrá que trabajar mucho para amarrar la permanencia.

A todo ello hay que añadir el papel de la afición. Una masa social que ha sido también decisiva para que el club pueda regresar a la categoría que perdió hace un año. La temporada pasada, pese a jugar en Tercera RFEF, el Charles se desplazó siempre acompañado por una hinchada que se ha hecho notar y que ha llevado la rojilla por todas las gradas de la categoría. Una afición que hizo además de San Lorenzo un fortín para devolver al Laredo a Segunda RFEF.

Todo suma y es necesario para competir en una categoría que no es desconocida para los laredanos. Dos tercios de la plantilla ya han competido en ella con regularidad. Por esa línea han ido además cinco de los refuerzos (Isuardi, Vassilakis, David Sanz, Dani Ojeda y Óscar Santiago), baqueteados en Segunda RFEF e incluso en categoría superior, para que el equipo no sufra de inexperiencia, y el club avanza que resta aún al menos una incorporación más para dar por cerrada la plantilla antes del cierre de mercado. El perfil que se busca es el de un jugador de banda que acompañe a los efectivos ya disponibles: Diego Marta, Héctor Tirado y Seti.

El nuevo presidente del club, Orlando Gutiérrez, se muestra «muy contento porque hasta el momento los chicos están compitiendo muy bien, aunque la pretemporada no tiene nada que ver con la Liga, pero están mostrando una buena imagen y generando buen juego. Además, pregunto al míster y está muy satisfecho con el trabajo que están realizando». Un buen punto de partida para un curso exigente en el que los pejinos buscan, sobre todo, hacerse fuertes en casa: «No va a ser un año fácil porque es un grupo muy fuerte y con mucho nivel. A nosotros solo nos queda luchar en cada partido y mantener infranqueable San Lorenzo».

El Laredo empieza así el domingo otro viaje en Segunda RFEF –la que será su segunda etapa en la joven categoría, de la que fue uno de los clubes fundadores–, con unos 550 devotos que han sacado su abono para soplar. Es el Charles de la ilusión y Luanco constituye el kilómetro 1 de la maratón de 34 partidos que arranca con el Laredo de vuelta.