El confinamiento perimetral del País Vasco no afectará a la competición en Segunda B

Evidentemente, el protocolo cambia. Hasta ahora, el club visitante debía remitir a la entidad anfitriona un listado con todos los miembros de la expedición, en el que se detallasen todos los datos personales: Documento Nacional de Identidad, nombre y apellidos, número de teléfono y dirección de correo electrónico. Todo con el fin de facilitar las posteriores labores de rastreo en el hipotético caso de que se produzca un contagio de coronavirus en el entorno de la celebración del encuentro en cuestión. Y así lo han estado haciendo hasta ahora tanto Racing como Laredo.

En el club pejino corre más prisa, porque tienen que desplazarse ya este mismo domingo. Pero en el Racing se mantienen a la espera de recibir nuevas instrucciones. Porque ya no servirá justificar quién va en el autobús, sino, además, argumentar debidamente por qué se lleva a cabo el viaje ante un posible alto de los cuerpos de seguridad en la frontera entre ambas comunidades autónomas.

Aunque la asistencia ya estaba muy restringida hasta ahora a causa de la reducción de los aforos en los estadios, lo que sí estará absolutamente prohibido con el nuevo Estado de Alarma será el desplazamiento de aficionados para acompañar a sus equipos, en cualquiera de las dos direcciones.

Las autoridades autonómicas tienen previsto reunirse en los próximos días con la presidenta del Consejo Superior de Deportes, Irene Lozano, para concretar la situación, aunque ni el organismo ni la Federación Española de Fútbol se ha planteado paralizar la competición. Pese a que no está considerada como profesional, su suspensión supondría un grave problema para muchos futbolistas, técnicos y empleados que viven alrededor del balón.

Si la pandemia de covid es preocupante en Cantabria, más aún en el País Vasco, donde el Ejecutivo de Urkullu no descarta imponer el confinamiento domiciliario si las cifras de contagios no mejoran. De hecho, varias localidades que tienen previsto visitar Laredo y Racing a lo largo de la competición, a día de hoy superan los 300 casos por cada 100.000 habitantes, caso de Portugalete, Sestao o Vitoria, entre otras. Pero hay otros tres enclaves que tienen más de 500 enfermos de coronavirus por cada 100.000 habitantes: San Sebastián, a donde viaja el Laredo el próximo domingo; Irún y Amorebieta.

En estas circunstancias, los clubes y sus futbolistas tratan de mantener la mayor normalidad posible para que la competición pueda seguir adelante sin sobresaltos ni contagios en el seno de las plantillas.