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Corren buenos tiempos por Sarón. Por el Fernando Astobiza, para más señas. Por mucho que este debut en la Segunda RFEF no esté resultando por ahora como querrían los aurinegros, 2021 ya es un año histórico en el Cayón. Ascendieron a la recién creada Segunda ... RFEF, ya un hito para un equipo que salvo en los setenta, un par de reestructuraciones del fútbol español atrás, nunca había estado en una Tercera que no fuera autonómica. Ahora jugarán la Copa; a secas. No la Copa Federación, sino la fetén. La Copa del Rey. Tenían dos posibilidades sobre 32 de que les tocara un rival de Primera. No sonó la flauta y el adversario será el Huesca. Un equipo sin mucho nombre, pero hasta hace no demasiado tiempo de máxima categoría. Un buen incentivo y, al menos eso se espera, una buena taquilla. Poco importaba este jueves que las lesiones castiguen al equipo, que algunos futbolistas no hayan llegado ya a ese pico de forma que buscan, que los resultados y la fortuna no acompañen. Este jueves era un día para disfrutar.
Así lo hicieron muchos aurinegros y cayoneses en el bar El Andén, donde se concentraron directivos, futbolistas y aficionados para seguir en directo el sorteo. Incluido el míster, Luis Fernández. El expreso de Argomilla vive momentos que nunca se olvidarán en el valle. Les acompañó también la alcaldesa, Pilar del Río. No era para menos. El equipo es casi una familia con nombres ilustres como los de Raúl Domínguez y Borja Lázaro, ya uno más de Sarón. Ambos han tenido por el momento menos protagonismo del que hubieran querido por diferentes motivos, pero ambos tienen una gran ascendencia en el vestuario.
«He tenido la suerte de disfrutar un año de este torneo, ya que me proclamé campeón con el Betis», recordaba este jueves el entrenador del Cayón, Luis Fernández. «Estamos contentos porque ahora están en Segunda, pero son un equipo que hace poco estaba de Primera y, dentro de las posibilidades que había, era de lo más atractivo», comentaba el de Argomilla.
La Copa será para él muy diferente a la que jugaba como futbolista. «No es igual por dos razones: primero porque soy entrenador y sobre todo por la categoría en la que estamos». Ahora afronta se primera eliminatoria como técnico: «Lo principal es saber dónde estamos.Viendo el equipo que viene, lo mejor es que todos los cayoneses lo disfruten; esa será nuestra misión ante el Huesca, y estamos contentos porque el partido va a ser en casa, claro».
La pena que siente el entrenador del Cayón es que habrá cuatro jugadores que no van a poder disfrutar del día. Con una plantilla de 21 jugadores, solo podrán jugar, como máximo 17. «Para ese día nadie se va a lesionar ni poner enfermo, pero es lo que hay. En realidad es lo peor del fútbol, que haya jugadores que no puedan disfrutar de ese momento». De todos modos, y aunque siempre «con los pies en el suelo», adelanta que elCayón jugará «para intentar jugar la próxima eliminatoria», como no podía ser de otro modo. Por difícil que sea el reto.
En cuanto a la iluminación, considera que «todo depende de las televisiones, que al final son las que mandan, las que exigen y las que deciden si se puede jugar a las tres de la tarde o no. Pero se está buscando que el partido se pueda jugar aquí –en el Fernando Astobiza– y, si no, que los aficionados se desplacen lo mínimo posible».
El técnico aurinegro aclara además que el partido no desviará la atención de la Liga, donde aún no han conseguido ganar. «Yo lo he vivido como jugador y esto es diferente; hay momentos en los que en Liga te va mal y en Copa bien y al revés. Este es un partido a cara o cruz y, en ese aspecto, ellos son los favoritos, por lo que son quienes tienen que sufrir la presión. Nosotros intentaremos competir lo mejor posible y hacerles daño para intentar dar la sorpresa», termina.
Si en La Estación estaban contentos, en El Andén se veía a la gente moderadamente satisfecha. La opción de un Primera se esfumó pronto. Después, cuando los jugadores conocieron el emparejamiento con el conjunto oscense, disfrutaron del momento al grito de: «Sí, sí, sí; nos vamos a Sevilla». Que la realidad no estropee una buena canción. Nunca se puede perder el buen humor. En Sevilla se juega, por cierto, la final. Al margen de eso, caras de emoción, alguna lágrima asomándose a los ojos y uno sonoro grito de alegría han acompañado en Sarón tras conocer el rival en el sorteo de la Copa. No faltaron los colores aurinegros ni el presidente, Nisio Humara.
Para él es un premio ya el sencillo hecho de medirse a un equipo de Segunda; un equipo de LaLiga. Un premio a lo conseguido el año pasado y algo para no olvidar, ya que sitúa a la entidad en el panorama futbolístico nacional en la competición del KO.
El Cayón, que disputará esta primera ronda de la Copa del Rey por primera vez en sus 106 años de historia en las instalaciones municipales del Fernando Astobiza con capacidad para 2.700 personas, no dispone de torretas de iluminación y eso supone un problema, porque no podrá jugarse muy tarde.Al contrario, habrá que optar por un horario infantil, porque de ir a otro campo nadie quiere siquiera oír hablar. Siendo en un día de labor, puede resultar un problema para que haya una buena entrada en el Fernando Astobiza, pero en eso habrá que pensar a partir de hoy. Ayer era un día para disfrutar.
«Para nosotros es un privilegio que venga a Sarón un equipo de esa categoría, ya que ese día será una maravilla para el pueblo, además intentaremos eliminarlos», explicaba la alcaldesa. «Estamos haciendo muchos esfuerzos para que el partido se pueda disputar aquí», explicaba Pilar del Río, que además asegura que las instalaciones tendrán luz el día del partido: «Hace dos horas he recibido un correo para celebrar la mesa de contratación, para adjudicar esas torretas que tanta falta nos hacen». En caso de no disponer de luz el Ayuntamiento de Cayón tiene un plan B: «Alquilaríamos unos generadores y unas torretas para poder celebrar el partido en el Fernando Astobiza».
«En el partido puede pasar cualquier cosa ya que el fútbol es once contra once», aseguraba el segundo entrenador del Cayón, Sergio Cuesta. Destaca que el Huesca es un equipo que juega muy bien y que tiene como objetivo el ascenso, «pero intentaremos dar una alegría a la afición pasando de ronda».
Humara, siguiendo con esa idea, se mostraba expectante acerca de lo que puede deparar el partido. «Sabíamos que era muy difícil que nos tocara un Primera y al final ha sido el Huesca. Es lo que marca el sorteo y haremos todo lo posible para pasar la eliminatoria». También Chili es consciente de la dificultad. Pero también sabe soñar: «Sabemos que es un equipo profesional, por lo que será muy difícil, pero esto es un premio para todos nosotros. Está dedicado a la afición y al esfuerzo de la plantilla durante el año pasado para conseguir esta clasificación. Además, intentaremos superarles». Avisados quedan.
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