«Este era el partido que necesitábamos»

Abrazos. Felicidad. Casi euforia. El Cayón era una fiesta sobre el césped sintético de Cobeña y unos minutos después, porque la celebración se prolongó. «El partido que necesitábamos», decía su entrenador. No era para menos. Un dato: los de Sarón han jugado nueve partidos en Liga. Solo han perdido tres, pero aún no han ganado. La losa pesaba y fue justo en la Copa, en el mejor momento posible, cuando el Cayón transformó su seriedad y su fútbol en victoria.

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Así lo reconocía y así se felicitaba su técnico, el histórico Luis Fernández: «Hoy era el día perfecto para intentar cambiar esa situación». El de Argomilla vio en los suyos un equipo que compitió, creó ocasiones y marcó «contra un gran equipo, y a la vista está cómo marcha en Liga y lo que se ha reflejado en el campo».

Tanto es así que no pudo evitar un pensamiento recurrente. Que, como tantas veces le ha pasado a su Cayón, le empataran el partido. No era falta de confianza, sino escarmiento por la experiencia. «Se te pasa por la cabeza, porque cuando te ocurre bastantes veces, quieras que no lo piensas, pero tenía la confianza de que era un día especial. Tenía que llegar un día en que tuviéramos la suerte de cara y ha sido hoy –por ayer–», decía el técnico. «Hemos demostrado que estamos compitiendo jornada tras jornada, sin dar la espalda a los partidos, y al fin hemos tenido premio», insistía. El mayor premio.

Tuvo también el de Argomilla palabras de agradecimiento a la afición del Cayón. Decenas de seguidores se desplazaron en un largo viaja a Cobeña para seguir la eliminatoria –era el único modo de hacerlo– y arropar va los suyos. Los futbolistas se lo recompensaron celebrando con ellos el pase. «Tenemos que agradecerles siempre el apoyo que nos dan. Tenemos la suerte de tener una gran afición que nos acompaña a cualquier rincón de España. Eso lo tienen pocos equipos y nosotros disfrutamos de ese don, un apoyo extra y que los chavales, cuando juegan fuera, vean nuestros colores en la grada y a nuestra gente animándoles», se felicitaba ayer.

«La mala fortuna que tuvimos con el sorteo se ha transformado en buena con la clasificación», concluía, máxime en «una competición muy bonita, a un solo partido y encima fuera de casa».