El covid permite el regreso de Tercera

El choque entre Cartes y Selaya en El Ansar, previsto para las 15.30 horas de hoy, abrirá la jornada del regreso de la competición en Tercera División. Una jornada en la que los colíderes del subgrupo A, Escobedo y Torina, se verán las caras contra Solares y Tropezón –mañana–, respectivamente. Mientras tanto, la Gimnástica visitará hoy al Castro.

En el subgrupo B, comandan la clasificación Cayón y Sámano. Los de Sarón reciben mañana, en el partido más destacado de la jornada, al Rayo Cantabria. Un partido que se disputará en Selaya por el cierre de las instalaciones del Fernando Astobiza. Por su parte, los naranjas viajan hoy hasta Polanco para verse las caras con el Rinconeda.

La plantilla del Vimenor también ha superado los test y jugará hoy frente al Barreda, pero los futbolistas, en un comunicado con junto con la directiva del club de Vioño, expresó su rechazo a la decisión de la Federación Cántabra de Fútbol de reanudar las competiciones al entender que «no se dan las condiciones adecuadas para jugar», además de por «el perjuicio económico que supone para el club» disputar sus encuentros sin público en La Vidriera.

El Laredo, en Segunda División B, también se sometió ayer a los preceptivos test, previos al choque que le enfrentará mañana al Arenas de Getxo, en Gobela. El club de San Lorenzo recibió los resultados, que fueron favorables y Manu Calleja no tendrá bajas debido al coronavirus en tierras vizcaínas.

En principio, y al no chocar con la normativa sanitaria de Cantabria, si algún futbolista hubiese dado positivo, sería aislado, mientras que sus compañeros, siempre que hayan dado negativo en el test, podrían disputar el encuentro. En Euskadi no es así y por eso los choques que debía enfrentar al Leioa con Tropezón y Racing fueron aplazados pese a que el club vasco sólo tenía un contagio en su plantilla.

Estas pruebas se realizan tras el acuerdo al que llegaron el mes pasado la Federación Española de Fútbol y la Asociación de Futbolistas Españoles para que los test fueron obligatorios para los jugadores de Segunda B y Tercera División, así como para las futbolistas de Primera y Segunda femenina y juvenil nacional. Unas pruebas que se realizarán entre 24 y 48 horas y serán sufragados, en parte, por el fondo creado por ambas instituciones como ayuda al fútbol modesto.