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David González
Martes, 9 de abril 2024, 16:12
La segunda sesión en el juicio por el desfalco al Deportivo Alavés -atribuido al ausente Dmitry Piterman y su ex lugarteniente Pepe Nereo- se está centrando este martes en detallar cómo vaciaron las arcas del club vitoriano. Oficialmente, durante su mandato se robaron 3, ... 1 millones de euros, más de la mitad presuntamente por parte exclusiva del que fuera antes propietario del Racing de Santander y del Palamós. Los tres administradores concursales encargados de reflotar la entidad tras la salida del estadounidense de origen ucraniano han sido tajantes. Han proclamado que dejaron la entidad al borde de «la disolución» por sus «gastos suntuosos y desproporcionados».
Estos expertos han pormenorizado cómo Piterman-declarado en rebeldía por no presentarse a la causa iniciada ayer, lunes, en el Palacio de Justicia de Vitoria- y su ex mano derecha, Nereo, supuestamente obraron de mala fe durante sus tres años de mandado (2004-2007). «Fue una situación sostenida en el tiempo consecuencia de una inadecuada gestión». Según sus informes, los ahora investigados fueron apercibidos en su momento de que iban en mala dirección. Sin embargo, mantuvieron «los errores advertidos, hubo irregularidad en vez de error».
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Asimismo han enumerado «pagos en efectivo» injustificados, facturas «duplicadas y «triplicadas» por un único concepto, alojamientos sin justificar en el único hotel de cinco estrellas de Vitoria… «Leyendo algunas facturas no se podía conocer ni el trabajo realizado ni el número de empleados utilizado», han concluido.
«No fueron errores, sino irregularidades», han insistido a preguntas de la fiscal Cristina Vicente. Para más inri, supuestamente desviaron fondos del Alavés a «una cuenta bancaria» domiciliada en Palamós. Piterman también cargó al Alavés viajes a Nueva York y Los Ángeles. Incluso hubo una compra de «televisiones, aparatos de música, relojes y móviles» entregados en un hotel propiedad del ucraniano. La factura, por supuesto, corrió a cargo de la entidad de Mendizorroza.
La defensa de Nereo -único imputado presente dado que ni Piterman ni su entonces esposa, Milanendra, han comparecido- ha tratado de restar importancia al papel de su cliente. Es decir, que desde su punto de vista, los únicos responsables del desfalco fueron los sospechosos ausentes.
¿Qué han respondido a esto los administradores concursales? Que Nereo puede que no tomara todas las decisiones contables pero «no nos consta que se opusiera a ello». El empresario cántabro se enfrenta a un global de 7 años de prisión por un delito de apropiación indebida y tres de falsedad contable. Nereo, eso sí, será el último en declarar. Lo hará este miércoles.
Alfonso Arriola, que fue director general de la entidad albiazul de julio a octubre de 2004, ha asegurado en su declaración que en esa época «nadie tomaba decisiones excepto Piterman». También en el caso de las salidas de fondos era el ucraniano el que decidía «única y exclusivamente».
Nereo era, «sin lugar a dudas», una persona importante dentro del club que entraba «en todas las áreas en las que Piterman le permitía entrar». Pero era, asegura Arriola, el «brazo ejecutor» del magnate, aunque «sin poderes para mover fondos porque eso solo lo podía hacer Piterman».
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