La hora de Gündogan

«Gündogan es una bendición que nos ha caído del cielo», dijo Xavi al poco de que el germano comenzara su andadura en el Barcelona. El técnico de Tarrasa puso en valor la valía de un jugador que, a sus 32 años, podía aportar ese toque de veteranía a un equipo plagado de talento joven. Allí donde Frenkie de Jong, Pedri y Gavi son el desparpajo, Ilkay podía ser el poso de cara a las grandes citas, cuando más quema la pelota. Ese rol lo ha empezado a cumplir a cuentagotas tras poco más de un mes de competición, pero se espera más de él y ese paso al frente debe llegar allí donde el Barça más ha sufrido.

Y es que los culés viajarán por primera vez este año en la Liga de Campeones y lo harán con el ex del City como gran estandarte en la parcela ancha. No están De Jong y Pedri por lesión, por lo que Xavi podría apostar por Oriol Romeu, Gavi y él para controlar un choque en el que por sus botas debería pasar todo el control de un partido clave en el grupo.

No en vano, cuando el Barça fichó a Gündogan el pasado verano se hizo con uno de los futbolistas clave del Manchester City campeón de Europa. Su aportación al equipo de Pep Guardiola la pasada temporada fue crucial. Junto a Rodri y Kevin De Bruyne formó una medular capaz de imponer su criterio en cualquier escenario y eso es lo que Xavi quiere que ocurra este miércoles con un importante cambio de actores a su alrededor. Es la hora de Ilkay Gündogan, el momento de dar un paso al frente.