Los 'Joaos' se alejan del Barça

Esa postura, paciente, es la que el Barça le ha trasladado a Hansi Flick. El germano ha comenzado la pretemporada con muy pocos efectivos y sigue a la espera de refuerzos para poder afrontar con garantías la pretemporada. Esos fichajes no llegarán en los próximos días. El Barça sigue pendiente de cuadrar las cuentas para poder volver a la regla uno a uno y eso afecta a posibles llegadas de gran envergadura como la de Nico Williams y también a otras de un menor coste como las de Joao Cancelo y Joao Félix.

Y es que los dos jugadores lusos afrontan un verano similar. El Atlético de Madrid busca una ventana más un traspaso para desprenderse de Joao Félix, jugador que sigue sin contar para Diego Pablo Simeone. El Barça hasta ahora era la mejor opción, pero la delicada situación económica y la entrada en escena de Nico Williams han hecho que el radar se amplíe a otros clubes como el Benfica, que podría estar interesado en adquirir, al menos, el 50% del jugador este mismo verano.

El caso de Cancelo es similar, pero tiene más pretendientes. Guardiola ya ha dejado claro a la cúpula del Manchester City que no cuenta con él y el traspaso es la única opción que se baraja, algo que no entra en los planes del Barça. Los 20-25 millones que podría costar el fichaje son una losa para los azulgrana, más centrados en otras operaciones. Equipos de Italia, donde el lateral portugués todavía goza de un gran cartel, como Juventus o Inter de Milan o incluso de Arabia Saudí están atentos a la situación de un jugador que cada vez está más lejos de los planes de Flick.

El rendimiento de los dos Joaos en el Barça, además, generó muchas dudas el pasado año. Félix fue de más a menos y apenas tuvo chispazos de gran jugador que quedaron opacados ante su falta de compromiso defensivo, mientras que Cancelo se afincó en el lateral izquierdo y fue la máxima expresión de sí mismo. Fue una solución permanente en ataque, pero también tuvo errores importantes que Xavi Hernández no dudó en recalcar en rueda de prensa. Esa irregularidad y la delicada situación económica que atraviesa el club culé hoy pesa para que ambos futbolistas se alejen cada día un poco más del Barça.