La puerta blindada del Selaya

Se da además la circunstancia de que el Selaya alterna a sus dos porteros. Marcelo es el más utilizado por Sergio Cuesta. A sus 38 años, el cancerbero de Villafufre suma 720 minutos. Comenzó a jugar al fútbol en el Parayas para dar el salto al Selaya y pasar por el Rayo Cantabria y Gimnástica antes de regresar a un club en el que suma ya trece temporadas consecutivas: «En Preferente siempre hemos sido un equipo que encaja poco, pero como este año, nunca», explica. Pone en valor a sus compañeros: «Tenemos una defensa que está a un grandísimo nivel, porque casi no nos hacen ocasiones». El portero del conjunto menos goleado de España lo tiene claro: «Desde la gente de arriba, que aprieta la salida de balón, y con dos centrales infranqueables como son Bruno y Román es muy difícil que nos lleguen, entre otras cosas porque el entrenador hace un buen trabajo táctico. También tiene su parte de culpa Roberto Bustillo, el entrenador de porteros».

El otro guardameta del Selaya es Christian, quien con 27 años dio sus primeros pasos como futbolista en la escuela del Pisueña para posteriormente finalizar su etapa formativa en el Bansander y el Cayón, con el que jugó en Preferente antes de firmar con el Selaya, donde lleva cinco temporadas.

«Ser el portero menos goleado de toda la Regional Preferente es lo menos importante. Claro que te da un plus de confianza, pero de nada serviría ser el menos goleado y no estar donde estamos clasificados ahora al final de temporada. No solo es mérito de los porteros, sino de todo el sistema defensivo», asegura Christian, que solo ha recibido un gol en los 450 minutos disputados: «Fue de casualidad, porque encima nos tiran poco», recuerda. «Estuve lesionado al principio y por eso he jugado algo menos que Marcelo, pero el entrenador nos reparte los minutos, a nosotros y a los jugadores de campo», añade.

«Llevamos una buena racha desde que ganamos la Copa Soberón. En la Liga no hemos perdido ningún partido y tan solo hemos caído en un partido: la eliminatoria previa de la Copa del Rey, y por penaltis. Ahora queremos más. Nuestro margen de mejora es todavía amplio, especialmente en el juego ofensivo». Lo dice Sergio Cuesta, el entrenador que firma estos números. Matiza, eso sí, a sus cancerberos: «Yo no les reparto los minutos; se los reparten ellos porque ambos tienen un nivel muy alto y, en función del partido, decidimos que juegue uno u otro».

Otra de las claves es el compromiso: «Algo más del 80% de los jugadores son de la zona y esto crea un sentimiento de pertenencia que hace que todos remen en la misma dirección». Todo con el objetivo de regresar el año que viene en Tercera. «Pero todavía es muy pronto para hablar de ello», avisa el técnico.

También se felicita José Antonio Regalado, el presidente del Selaya. Lo que está pasando esta temporada en su club no es fruto de la «casualidad». «Es un buen grupo humano y todos los jugadores están trabajando muy bien con los técnicos». Como su entrenador, en lo que piensa es en volver a Tercera: «El equipo tiene la flecha hacia arriba y hasta tendremos suerte en el sorteo de la Lotería de Navidad», aventura entre risas. Buen ambiente también hay de sobra en El Castañal.