El derbi entre Gimnástica y Cayón termina en tablas

Fue un partido vibrante desde el primer minuto y ambos técnicos incluyeron novedades en sus onces respecto al último encuentro. Sesi Fernández introdujo tres cambios respecto a la derrota ante el Langreo, las de Mediavilla y los hermanos Delgado, Javi y Alberto. Por su parte, Luis Fernández dio entrada a Mier y Cagigas en el lugar de Chus Villar y Turrado.

La Gimnástica, arropada por su fiel afición que volvió a escuchar la llamada del club para ocupar buena parte de las tribunas de El Malecón -1.192, espectadores-, salió sin complejos ante el conjunto de Sarón, que intentó en los compases iniciales hacerse con el control del partido, pero con el paso de los minutos los aurinegros lo nivelaron.

La primera ocasión del encuentro la tuvo el Cayón, que dispuso de una buena oportunidad antes de que se cumplieran los primeros diez minutos de partido. Fue Dani Salas quien disparó desde la frontal, marchándose el balón rozando el larguero.

El conjunto de Sarón estaba en estos primeros minutos llegando más por la derecha e instalado en campo rival gracias a su verticalidad y presión alta. Pasados los primeros minutos, el partido bajó un poco el pistón y también el conjunto torrelaveguense se acercó a la portería defendida por Galnares. De un saque de esquina llegó una buena oportunidad para los blanquiazules, que en una jugada ensayada intentaron hacer el primero. Tobar remató en semiescorzo para que el balón se marchase fuera.

Un pase filtrado entre la defensa gimnástica llegó a los pies de Cañizo, que ante la salida de Mediavilla le batió con un disparo raso. Era el 0-1 en el minuto 16, en un partido que transcurría sin mucho ritmo de juego y con algunas interrupciones a causa de la intensidad que pusieron los dos conjuntos en este inicio y a lo largo de todo el desarrollo del partido.

Tras el gol encajado, se fue acentuando el dominio de la Gimnástica a medida que el Cayón reculaba a su portería e intentaba salir a la contra. Esa lucha en el centro del campo, sin embargo, no se tradujo en ocasiones para ninguno de los contendientes, sobre todo porque el juego careció de la continuidad necesaria y ninguno de los equipos se quiso salir del guion preestablecido. Pero en una jugada aislada un derribo de Basurto a cargo de Héctor Alonso en el área visitante lo consideró el colegiado como penalti. Una acción que no desaprovechó Alberto Gómez para poner el empate en el marcador.

Entonces el encuentro entró en una fase de alta intensidad y poco acierto. Con muchos contraataques de ambos conjuntos, pero que no encontraron finalización. El balón permaneció en el campo del conjunto de Sarón, bien en los pies blanquiazules o bien en los de los visitantes, que sostuvieron la posesión del esférico en su propio campo. Así pasaron los minutos hasta llegar al descanso con el empate a uno.

En la segunda parte el partido siguió siendo el mismo, porque aunque la Gimnástica arriesgó de manera visible, seguía sin encontrar el pase fácil y rápido con el que descolocar a un Cayón muy confiado en cómo estaba manejando el partido, aunque se notaba cierto cansancio en algunos de sus jugadores tras el encuentro de Copa del pasado jueves ante el Athletic. Fueron los blanquiazules los que dispusieron de la primera ocasión en la segunda parte por medio de Basurto, pero su lanzamiento desde la frontal, tras recorrer cincuenta metros con el balón, se marchó rozando el poste. Fue la antesala del segundo gol de la Gimnástica, obra de Javi Delgado, tras un disparo cruzado en el minuto 77. Pero tres minutos más tarde, Riki aprovechó una serie de rechaces en el área blanquiazul para de nuevo poner las tablas en el marcador.

Pero no hubo tiempo para más y, aunque el Cayón terminó volcado sobre el campo de la Gimnástica, el marcador no se movió y el derbi cántabro terminó con empate a dos.