La Gimnástica se crece ante la adversidad

Entre toda esta bruma emergió una figura: el portero juvenil Luis Palomeque. Su primera intervención de mérito llegó antes de cumplirse el minuto diez de encuentro, tras desviar a córner un chut colocado de Herrero. No tardó en volver a ser protagonista. En el minuto 12, tras un disparo raso y fuerte nuevamente de Herrero, el joven portero de la Gimnástica atrapó la nueva oportunidad del Covadonga.

Mientras, los hombres de Fran Martín intentaban llegar hasta las inmediaciones de Bussmann, pero se encontraron con un equipo asturiano bien situado y cómodo sobre el terreno de juego, sin sufrir en exceso ante las embestidas de los blanquiazules. A pesar de ello, la mejor oportunidad en la primera mitad fue para los torrelavenguenses. Un remate de cabeza de Unai acabó en el fondo de la portería visitante, pero la colegiada lo anuló por un dudoso fuera de juego.

La Gimnástica reaccionó tras su vuelta del vestuario. Y no pudo comenzar mejor. El meta Bussmann no logró atrapar un balón y Tobar, que estaba atento a la jugada llevó el esférico al fondo de la meta visitante. Era el 1-0. Pudieron ampliar la diferencia los de Martín, pero Saúl no acertó a batir al meta asturiano en el mano a mano.

Lo volvieron a intentar los blanquiazules tras una cabalgada de Saúl por la banda izquierda. El extremo puso un centro en el segundo palo que Alberto Gómez remató alto. De nuevo Tobar la tuvo, pero su chut rebotó en un defensa.

El Covadonga lo intentaba a balón parado. La ocasión más clara la tuvo Samu, tras un lanzamiento de falta que se fue por encima del larguero.

Hasta el pitido final, la escuadra visitante buscó la igualada para no irse de vacío de El Malecón, pero se encontró enfrente con un solvente equipo de Fran Martín en labores defensivas, que no dio opciones a los asturianos, y que se aseguró su segunda victoria consecutiva para soñar con la salvación.