Javi Delgado salva un punto para la Gimnástica

Davo, con un remate desde el interior del área, dio el primer susto del partido a la Gimnástica. Respondieron los cántabros con un lanzamiento de Marquitos que se fue rozando el larguero. No jugaron cómodos los asturianos, que se toparon con un equipo local que impedía que hicieran su juego.

Por otro lado, el cuadro visitante estuvo llegando más, siendo más protagonista. Sin embargo, no terminaban de generar un peligro claro. Por otro lado, la falta de puntería y la gran labor defensiva del Avilés, evitaron el 1-0, ya que Chus Ruiz remató un balón en el segundo palo que llevaba marchamo de gol, pero tras tropezar en un defensa visitante se fue a córner en el último minuto de la primera mitad. Así, los jugadores regresaron al túnel de vestuarios con tablas y sin goles.

Tras la reanudación, y pese a que no hubo cambios, el decorado sí se modificó. Salieron unos y otros a por todas y las ocasiones se encadenaron, ahora en una portería y, de inmediato, en la contraria. Davo fue el primero que lo intentó, con dos disparos casi consecutivos: el primero se fue por encima del larguero y el segundo rozando el poste. Y replicó Alberto Gómez con un intencionado remate, más colocado que fuerte, que se marchó fuera; el mismo destino que tuvo chut de Chus Ruiz.

El técnico visitante decidió mover el árbol en ataque, incorporando a Rojas. Y no le pudo salir mejor, ya que un centro del delantero tocó la mano de Lavsamba dentro de su área y la colegiada lo consideró penalti. A Natalio no le tembló la pierna e inauguró el marcador con un tiro escorado hacia la derecha.

La Gimnástica no se amilanó y se fue a por el empate y a punto estuvo de conseguirlo Chus Ruiz con un disparo que se estrelló en el lateral de la red. Tampoco estuvo afortunado Tobar con su remate de cabeza ya que se perdió por encima del larguero. Tanto fue el cántaro a la fuente, que un lanzamiento de falta de Javi Delgado desde fuera del área acabó en el fondo de la red de la meta de Álvaro. Era el empate a uno. La última fue para el propio goleador blanquiazul, que desde fuera del área pero que Álvaro desvió a córner.