El Rayo se vuelve de vacío de Compostela

xxNo tuvo una feliz entrada en 2024 el Rayo Cantabria, que perdió ante un Compostela superior en un partido, sin embargo, condicionado por dos penaltis en contra -uno muy dudoso- y la expulsión de Marco al inicio del segundo acto. La derrota extiende a tres la racha de encuentros sin ganar de los pupilos de Ezequiel Loza.

Después de diez minutos iniciales de tanteo y escasez de aproximaciones reseñables, el Rayo Cantabria generó la primera ocasión destacada. Fuentes superó a Juampa en el interior del área y disparó cruzado. Replicó el Compos, precisamente por medio de Juampa, antes del cuarto de hora, con un trallazo con la pierna izquierda que se estrelló en la parte exterior del poste derecho de la meta de Álvaro Jiménez. Fue el inicio de unos minutos en los que el cuadro santiagués fue mejor y se sintió más cómodo. Un buen control de Parapar ante Gomeza, tras servicio de Jordán, lo concluyó con un remate excesivamente alto.

Al filo del ecuador del primer acto, Fuentes probó a Pato con un chut que el meta uruguayo atrapó sin problemas. El propio Fuentes, muy activo y que estaba siendo el mejor del filial santanderino, sufrió una caída en el minuto 33 que le ocasionó una lesión en un hombro que le impidió continuar en el encuentro. Parapar, mientras el Rayo jugaba con diez efectivos antes de la entrada de Marcos Bustillo, chutó centrado y detuvo bien el cuero Álvaro Jiménez.

El equipo de Míchel Alonso volvió a llegar hasta la línea de fondo por medio de Caballé y su pase al segundo palo lo remató Juampa. Marco evitó que el chut acabara creándole problemas a su portero. Un par de buenas transiciones del Rayo Cantabria protagonizadas por Obeng y Jeremy, caído a la banda derecha tras la marcha de Fuentes, no tuvieron un desenlace favorable para los pupilos de Ezequiel Loza, castigados en el tiempo añadido del primer acto con un penalti dudoso entre Marcos Bustillo, que ya estaba amonestado, y Marco sobre Juampa. Un lanzador infalible durante años como Manu Barreiro demostró su fiabilidad desde los once metros y batió a Álvaro Jiménez, que se estiró hacia su izquierda mientras el esférico entraba mansamente por la parte derecha de la portería. Corría el minuto 50.

Si el final de la primera mitad resultó letal para el filial, el inicio de la segunda siguió los mismos cauces, ya que el colegiado mostró la segunda cartulina amarilla a Marco por un manotazo en el centro del campo sobre Manu Barreiro.

Jugando con diez, y aprovechando que el Compos también estaba con un hombre menos mientras era atendido Manu Barreiro, fue capaz el Rayo de empatar el partido. Marcos Bustillo progresó por el carril derecho y puso un centro medido que Álvaro Santamaría cabeceó. Pato tocó la pelota, que golpeó en el palo derecho y se acabó colando en la portería.

En la batalla táctica de los cambios, Loza retiró al autor del gol y dio paso a Neco Celorio, mientras que Míchel Alonso apostó por Roque, que se reestrenaba tras su regreso a la entidad compostelana, y Hugo Matos. Y el Compos se volvió a adelantar en el marcador en una apertura a la derecha para Juampa, que puso un centro fantástico que Parapar, completamente solo, únicamente tuvo que empujar a placer. Y pudo marcar de nuevo la escuadra blanquiazul si Jordán hubiera atinado a poner entre los tres palos un balón de oro de Antas, colofón a una extraordinaria acción individual.

Volvió a aparecer en la foto de un nuevo penalti Marcos Bustillo, esta vez incuestionable. Derribó a Parapar tras verse superado. Con la misma maestría que en el primer lanzamiento, Manu Barreiro cambió de lado y volvió a engañar a Álvaro Jiménez para hacer el 3-1. Y pudieron aún aumentar la cuenta, con el Rayo alicaído, Jordán, aunque su remate se perdió cerca de la escuadra izquierda, y Manu Barreiro, a cuyo cabezazo respondió con una gran parada Álvaro Jiménez.

Pudo, no obstante, hacer el 3-2 el filial santanderino en el tiempo añadido, en una doble ocasión marrada por Dani González y Samu Calera.

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